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Fondos de inversión

Azora intentará levantar hasta 750 millones en su nuevo fondo de infraestructuras

Su gestora lanza un vehículo en el sur de Europa sobre infraestructuras 'verdes', digitales y urbanas.

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Azora vuelve a salir al mercado para levantar entre 500 y 750 millones de euros en su nuevo fondo de infraestructuras, Azora Strategic Infrastructure Fund FCR. Un vehículo dirigido a inversores institucionales, inversores profesionales y patrimonios familiares o personales “de cierta entidad”, como establece su folleto, y que invertirá en infraestructuras relacionadas con la transición energética, infraestructura digital e infraestructura urbana.

El mínimo de inversión será de cinco millones de euros, tendrá una duración de diez años desde el primer cierre con la posibilidad de ser prolongado por hasta dos años más, y pondrá el foco en activos del sur de Europa. Aunque también podrá invertir en compañías o activos que operen en otros países de Europa, así como hasta un 10% en otros países desarrollados de la OCDE.

El nuevo fondo de Azora Gestión se centrará principalmente en sectores con tendencias de crecimiento atractivas y sostenibles en el largo plazo (o megatendencias), y donde se pueda aplicar “un enfoque operativo, de desarrollo y de creación de valor”.

Los activos en radar estarán en mercados pequeños o medianos (lower mid-market), con tickets de entre 50 y 150 millones de euros cada uno, y compuestos a su vez por distintos activos o sociedades operativas que gestionen infraestructuras, tanto en actividad greenfield como en buy and build.

Según el folleto, el promotor o los coinversores usarán “esfuerzos razonables” para aportar o transmitir activos al fondo en su cierre inicial y en concepto de inversión semilla, hasta la totalidad de la participación que estos ostenten.

Y lo harán en tres plataformas que se encuentran en estadios tempranos de su desarrollo, como son movilidad urbana (Infrabask, que incluye la estación de transporte intermodal de Bilbao adquirida a Amenabar y la estación de autobuses de Atotxa en San Sebastián), Biometano España (con la sociedad Queimada Investments) y Biometano Italia (con la compañía Draycott), cada una compuesta por una serie de activos o sociedades operativas.