Fachada en la sede de Indra en Madrid.

Fachada en la sede de Indra en Madrid. Jesús Hellín Europa Press

Mercados La lupa de Bolinches

Indra pone a prueba el primer soporte de relevancia técnica situado en los 33,91 euros

La fase correctiva gana intensidad y el valor necesita reaccionar de inmediato para evitar un deterioro mayor.

Más información: El Ibex 35 busca los 15.000 puntos con el empujón de Sabadell, IAG y Rovi

Eduardo Bolinches
Publicada

Los mercados de renta variable inician la semana con un leve optimismo, justo cuando se acerca la fecha límite de mañana para la imposición de nuevos aranceles de EEUU a China. En Europa, la clave estará en los datos de inflación.

Por su parte, el Ibex 35 arranca desde los 14.824,9 puntos, impulsado por su cierre de la semana pasada, la mejor en cuatro meses. La atención ahora se centra en alcanzar la barrera psicológica y de referencia a corto plazo de los 15.000 puntos. Al examinar los valores de su composición, hoy destaca el comportamiento en la parte baja de la tabla de las acciones de Indra.

Hay varios aspectos fundamentales que están teniendo en cuenta los inversores. Recientemente, Indra Group ha cerrado la compra de la planta de Gijón de Duro Felguera, con el objetivo de convertirla en una de las fábricas de vehículos militares más avanzadas de Europa.

Sin embargo, el hecho más relevante que hoy está influyendo de forma negativa en la cotización es la posibilidad de un acuerdo, o al menos un acercamiento de posturas, en la guerra de Ucrania. El sector defensa en Europa también registra caídas con cierta intensidad en el momento de confeccionar estas líneas.

Si analizamos los títulos de Indra desde el punto de vista técnico, se observa un sesgo claramente alcista y una pauta de mínimos y máximos ascendentes que ha estado en todo momento acompañada por su directriz alcista. Esto ha permitido al precio avanzar entre los meses de febrero y julio un 111%, si consideramos los máximos alcanzados hace menos de un mes en los 39,44 euros.

Esta zona de máximos históricos se ha convertido en la resistencia horizontal más importante a la que se ha enfrentado el valor, dejando un techo de mercado a corto y medio plazo. En este nivel, los alcistas han comenzado a deshacer posiciones, provocando un ajuste correctivo en el que el valor todavía está inmerso.

Evolución de las acciones de Indra

Evolución de las acciones de Indra Eduardo Bolinches Tradingview

El ajuste se salda con una caída de más del 13% en pocas sesiones, donde se ha perdido un soporte intermedio en los 36,50 euros, así como la media móvil de 50 periodos, que pasaba por los 36,09 euros por acción.

Trazando el retroceso proporcional de Fibonacci al último gran tramo de subidas, desde los 16 euros hasta los 39,44 euros, se observa que la cotización se sitúa frente al primer soporte horizontal y primer nivel de retorno proporcional, desde donde debería producirse algún tipo de reacción alcista.

Si los compradores no logran reaccionar y se pierde este apoyo intermedio, la caída nos llevaría rápidamente a buscar, primero, el origen del hueco alcista de junio en 33,26 euros y, después, la media móvil de 100 sesiones, que pasa por los 32,80 euros. Por tanto, si el valor forma parte de nuestra cartera, conviene vigilar que no se pierda este soporte, ya que la corrección podría intensificarse hacia niveles inferiores.

Técnicamente, su directriz alcista o zona de soporte creciente ha quedado rota a la baja con las caídas de las últimas cuatro jornadas, lo que empeora sensiblemente su aspecto técnico y obliga a extremar la cautela. Esta pérdida ha reforzado la presión vendedora recientemente.

Con este escenario y los altos niveles de sobreventa acumulados, es posible esperar un rebote técnico desde niveles cercanos a los 34 euros por título, aunque la estrategia obliga a ser más exigentes y sobre todo más rápidos. La confirmación de esta reacción dependerá de la superación de resistencias intermedias que devuelvan confianza al corto plazo.

Para buscar un rebote técnico, el precio debería formar una vela o figura de martillo en gráfico diario y superar la zona clave de los 35 euros, lo que permitiría recuperar el soporte perdido —ahora resistencia— y dirigirse hacia la siguiente referencia técnica que se sitúa en los 36,50 euros.

En esta estrategia, no perderemos de vista la cotización, evitando que el valor caiga, en cierres, por debajo de los mínimos de hoy, exactamente en los 33,80 euros. Una perforación de este nivel activaría nuevas ventas y podría abrir la puerta a descensos hacia soportes de mayor relevancia.