Las palabras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) han actuado de bálsamo en Wall Street. Sus principales índices se quedaron con el respaldo que este organismo ha dado a China, al tiempo que ha estimulado el turismo y el comercio. La OMS también ha precisado que estamos hablando de una emergencia sanitaria internacional.

El Dow Jones ha cerrado con unas ganancias del 0,43% y en los 28.858 puntos. El S&P alcanza los 3.283 tras subir un 0,3% y el Nasdaq cierra en 9.298 puntos, tras anotarse un 0,26%.

Además de los fallecimientos y del crecimiento en el número de afectados, los inversores empiezan a temer un impacto real del coronavirus en la economía global. Empezando por la china, después de que un economista del propio Gobierno del gigante asiático asegurase ayer que el crecimiento del país podría bajar hasta un 5% en el primer trimestre.  

Los inversores también saben que el Gobierno chino podría tomar nuevos estímulos fiscales para evitar ese impacto, pero de momento la prudencia se impone a la espera de conocer cómo evoluciona el virus y su impacto en la economía. De momento, el mercado ya ha conocido los datos del PIB de EEUU de 2019, con un crecimiento del 2,3% frente al 2,9% de 2018, lo que representa el dato de expansión más débil desde 2016 ante la caída de la inversión y las tensiones comerciales, según los datos publicados por el Departamento de Comercio. En el cuarto trimestre, el PIB de EEUU registró un crecimiento anual del 2,1%, en línea con los tres meses anteriores.

Uno de los protagonistas ha sido Tesla. La fabricante de vehículos eléctricos suma otro acelerón, del 10,30%, al vertiginoso rally que se está apuntando en las últimas semanas mientras que los inversores optan este jueves por las ventas en una mayoría de valores. La temporada de resultados deja sorpresas positivas en más compañías.

En este escenario, los resultados empresariales retoman el protagonismo con cotizadas de enorme peso en el mercado rindiendo cuentas a los inversores. En el lado de las pérdidas se sitúa Facebook, cuyos títulos se desploman un 6,14% después de cumplir las previsiones de los analistas con su beneficio de 16.800 millones de dólares –un 16% inferior al de 2018- pero defraudar con el menor crecimiento en los ingresos y el número de usuarios.

En la otra parte de la tabla se sitúa Microsoft, que rebota un 2,8% tras batir las previsiones del mercado con un beneficio de más de 11.600 millones de dólares, un 38% más, con una mejora del 14% en sus ingresos hasta los 36.910 millones de dólares.

Sin embargo, el gran protagonista de las subidas es Tesla, que se dispara un 10,3% por encima de los 640 dólares, tras superar las expectativas del mercado con sus resultados anuales y asegurar que la compañía se siente “cómoda” y preparada para vender más de medio millón de vehículos este año. 

Los inversores también permanecen atentos a la evolución del gigante petrolero Chevron, que sube un 0,93% después de anunciar un incremento del dividendo de más del 8%, hasta los 1,29 dólares por acción.