Fotografía de un grupo de viajeros este lunes en el aeropuerto internacional Simón Bolívar, que sirve a Caracas, en Maiquetía (Venezuela).

Fotografía de un grupo de viajeros este lunes en el aeropuerto internacional Simón Bolívar, que sirve a Caracas, en Maiquetía (Venezuela). Miguel Gutiérrez EFE

Turismo

La otra gran crisis que aisló a Venezuela del mundo: Iberia, Air France y otras dejaron de volar al país en 2017

La situación política y social, unidas a los impagos del Gobierno de Maduro, provocaron las cancelaciones de vuelos de las aerolíneas internacionales.

Más información: IAG hace oficial su interés por TAP y entra en la puja con Air France y Lufthansa

Publicada
Actualizada

Las claves

En 2017, Venezuela sufrió un fuerte aislamiento aéreo cuando la mayoría de aerolíneas internacionales suspendieron vuelos por motivos de seguridad y crisis política.

La crisis se agravó por los impagos del Gobierno venezolano, que acumuló deudas millonarias con las aerolíneas, dificultando la operación de vuelos internacionales.

En la actualidad, nuevas suspensiones de vuelos por parte de Iberia, Air Europa, Plus Ultra y otras aerolíneas han dejado a Venezuela prácticamente aislada del tráfico aéreo internacional.

El Gobierno venezolano ha respondido revocando derechos de vuelo a múltiples aerolíneas que no reanudaron operaciones, afectando aún más la conectividad del país.

Venezuela vive una de las mayores crisis aéreas. La mayoría de aerolíneas internacionales han suspendido sus vuelos, incluidas Iberia y Air Europa. Una situación con precedentes. El país, bajo el régimen de Nicolás Maduro, ya sufrió un grave aislamiento aéreo en 2017.

¿Qué ocurrió ese año? El 30 de julio de 2017 se celebraron las elecciones a la Asamblea Nacional Constituyente en Venezuela.

Durante esos días, la tensión política generó graves enfrentamientos en las calles de Caracas, y otras ciudades del país, entre los opositores al Gobierno de Nicolás Maduro y las fuerzas del orden.

Una situación que las aerolíneas entendieron de riesgo para la seguridad de sus pasajeros.

¿El resultado? Cancelaciones generalizadas por parte de aerolíneas como Iberia, Air France, Lufthansa, Latam, Avianca, Delta... En total, una docena de aerolíneas dejaron de volar al país.

Algunas, como Avianca, justificaron la decisión por la falta de demanda, que estaba asociada a la crisis política de Venezuela. Otras, como Iberia, “a las dificultades operacionales y de seguridad”.

La aerolínea española Air Europa se quedó como uno de los pocos enlaces entre Europa y Venezuela durante esa crisis.

Una persona camina por el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar este lunes, en Maiquetia (Venezuela).

Una persona camina por el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar este lunes, en Maiquetia (Venezuela). Ronald Peñ EFE

No suspendió operaciones, pero monitorizó la situación minuto a minuto.

Casi como ocurre con la actual crisis en la que cada aerolínea decide los plazos en los que mantendrá las suspensiones.

La crisis de hace ocho años demuestra que tanto el país como las aerolíneas ya están acostumbradas a esta situación.

“Venezuela es un país con inseguridad aérea desde hace años y con muchos altibajos políticos que influyen en la seguridad”, asegura a este periódico Jorge Martínez Gray, secretario del sindicato de pilotos Sepla.

Impagos

Pero la crisis política y social no fue la única que llevó a las aerolíneas a suspender vuelos. Los impagos del Gobierno venezolano también están detrás.

Desde 2013, el régimen venezolano, primero bajo el mando de Hugo Chávez y luego con Nicolás Maduro, ha acumulado deudas multimillonarias con aerolíneas internacionales, reteniendo pagos por venta de billetes de avión en moneda local.

En 2014, los impagos superaban los 4.000 millones de dólares (3.450 millones de euros al cambio actual), según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA).

“Hay compañías que no han vuelto a ir por el remanente acumulado”, señala Jorge Martínez. Alitalia, Air Canadá o Aeroméxico no volvieron aprovechando la crisis de 2017.

Otras, como Iberia, lo hicieron cuando las condiciones de seguridad lo permitieron.

De hecho, la española ha llegado a ampliar con el paso del tiempo sus frecuencias semanales, pasando de tres a las cinco actuales. Las mismas que tiene Air Europa.

Crisis actual

Por lo que la historia parece repetirse con la situación actual, en la que Iberia mantiene cancelados sus vuelos a Venezuela hasta el 31 de diciembre.

Air Europa tampoco volará hasta, al menos, el 12 de diciembre y Plus Ultra, hasta el 4. Situación que se repite en otras aerolíneas internacionales.

¿Por qué? Hace más de una semana, la Administración Federal de Aviación (FAA) instó a los vuelos comerciales a extremar la precaución al sobrevolar Venezuela y el sur del Caribe ante lo que considera una situación potencialmente peligrosa en la región.

Eso provocó que muchas aerolíneas suspendieran vuelos. En España, Iberia, Air Europa y Plus Ultra lo hicieron.

Y en el resto del mundo otras siguieron el mismo camino: la portuguesa TAP, la colombiana Avianca, la brasileña Gol, la chilena Latam y la turca Turkish Airlines.

A Venezuela no le gustó esta decisión. El Gobierno venezolano dio 48 horas para que las aerolíneas que habían suspendido vuelos volvieran al país.

Al no hacerlo, el pasado jueves retiró los derechos de vuelo a Iberia, TAP, Avianca, Latam Colombia, Turkish Airlines y Gol, según la Gaceta de la República Bolivariana de Venezuela.

Cinco días después hizo lo mismo con Air Europa y Plus Ultra, según pudo confirmar este periódico.

Aerolíneas en el aeropuerto de Caracas.

Aerolíneas en el aeropuerto de Caracas. EFE

A esto hay que añadir el aviso del pasado fin de semana del presidente de EEUU, Donald Trump, a todas las aerolíneas de que el espacio aéreo venezolano está cerrado.

Una medida que suele ser el primer paso para una operación militar.

Esto ha supuesto que el país esté prácticamente aislado. IATA ya alertó de los efectos negativos de quitar los derechos de vuelo.

“Esta decisión reducirá aún más la conectividad hacia el país, que ya es uno de los menos conectados de la región”, señalaron.

Y es que ahora mismo sólo mantienen operaciones en el país Copa, Wingo, Boliviana de Aviación y Satena -que vuelan a destinos de América Latina y el Caribe-, así como las compañías locales Avior y Conviasa (estatal).