Hablamos de compañías como Grupo Juliá (que solicitó 38 millones), las aerolíneas Volotea (185 millones) y Air Nostrum (103 millones de euros) o las hoteleras Room Mate (52 millones) y Silken (32 millones). 

En muchos casos, como el de Juliá y Silken, el proceso “está muy avanzado”, según fuentes cercanas, y se espera que en las próximas semanas se aprueben. De hecho, algunas de estas empresas solicitaron el rescate hace más de un año. Pero hay expedientes más complicados de resolver, como el de Abengoa (249 millones) por su situación actual. 

Hotel de Silken en Laguardia.

En total, el organismo ha recibido 69 solicitudes durante el más de año y medio que lleva en funcionamiento. Hasta la fecha, de estas solicitudes se han aprobado 17 ayudas públicas por valor de 2.040 millones de euros, un 38% del total de los 5.365,5 millones solicitados. Sin embargo, aunque quedarían 52 peticiones por resolverse, lo cierto es que algunas empresas han sido descartadas o simplemente ya no requieren de estas ayudas, como Cabify. 

También ha habido compañías (como Pangea Travel o Vicens Vives) que realmente necesitan menos dinero del solicitado inicialmente y su solicitud se ha desviado al fondo de rescate para pymes que gestiona la Compañía Española de Financiación al Desarrollo (Cofides). Cabe recordar que tramita las peticiones de menos de 25 millones de euros.

Así, es difícil saber el número exacto de empresas que todavía esperan esta ayuda pública, aunque la cifra podría rondar entre las 30 y 40 compañías, según fuentes del sector. 

Cuenta atrás

El Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, dotado con un total de 10.000 millones de euros, fue aprobado por el Gobierno en julio de 2020 con el objetivo de aportar apoyo público temporal para reforzar la solvencia de empresas no financieras afectadas por la pandemia que sean consideradas estratégicas para el tejido productivo nacional o regional. 

La prórroga acordada por la Comisión Europea amplía el campo de aplicación del marco temporal de ayudas estatales hasta el 30 de junio de 2022. Es decir, queda poco más de dos meses para resolver favorablemente o no los expedientes. 

Edificio de la SEPI.

Desde la SEPI siempre han reconocido que “es un proceso complejo” ya que se están gestionando préstamos con dinero público y se debe pasar por complejos y exhaustivos análisis. Esto implica la contratación de asesores externos financieros y jurídicos -mediante concurso público- para el estudio de las solicitudes de ayuda llegadas al fondo. 

Cabe recordar que los préstamos no son a fondo perdido. Es decir, las empresas tienen un plazo -de siete años en muchos casos- para devolver el dinero al Estado que se está canalizando, por norma general, en un préstamo participativo y otro ordinario.

2.040 millones de euros

En total, como hemos comentado anteriormente, se han otorgado 2.040 millones a 17 empresas. En el fondo quedan algo menos de 8.000 millones que, tal y como recuerdan desde la SEPI, no hay obligación de gastar. 

El primer gran rescate que se dio fue en noviembre de 2020 y fue, además, el de mayor montante: el de Air Europa por 475 millones. Después llegó el rescate para la fusión de las agencias de Globalia y Barceló, Ávoris, (320 millones).

Más tarde, saltó la polémica con los 53 millones de euros otorgados Plus Ultra por su escaso carácter estratégico y los problemas de viabilidad de la compañía. De hecho, recientemente ha comenzado a devolver parte del préstamo. 

A estos se sumaron más tarde Duro Felguera (120 millones); Tubos Reunidos (112 millones de euros); la acerera Rugui Steel (25 millones), la hotelera Hotusa (241 millones); Serhs (34 millones), Grupo Airtificial (34 millones) y Reinosa Forgings & Castings (27 millones de euros); grupo Losan (35 millones de euros), Soho Boutique Hoteles (30 millones), Abades (29,3 millones), Ferroatlántica (34,5 millones), Eurodivisas (45 millones), Wamos (85 millones) y Técnicas Reunidas (340 millones).

En paralelo, el fondo Fonrec de Cofides para pymes ha aprobado 27 solicitudes, con un monto total de 270 millones de euros; nueve de ellas pertenecen al sector industrial, seis a hoteles y restauración, tres a actividades deportivas y de ocio y uno a transporte.