El Gobierno ha decidido finalmente rebajar hasta los 995,5 millones de
euros el precio de salida de la subasta de 700 MHz, según consta en el pliego de condiciones publicado este lunes en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Una estrategia que ya había sido adelantada por este periódico.

Estamos ante una reducción del 15% respecto de los 1.170 millones de euros que estableció la consulta pública en su proceso de audiencia pública. La reducción en el precio es un guiño a las operadoras de telecomunicaciones que criticaron el elevado valor inicial.

Estamos hablando de una subasta de espectro, por lo que estos 995,5 millones de euros son solo el precio de salida. En la medida que las pujas sean más numerosas y se prolonguen en el tiempo el precio final a pagar por los operadores podría ser mucho más elevado.

En cualquier caso estamos lejos de los 2.100 millones que el Ministerio de Hacienda se marcó como objetivo recaudatorio en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) 2021.

El Ejecutivo consignó además en este pliego definitivo la concesión de las frecuencias que tendrá una duración mínima de 20 años, prorrogables por 20 años más. Una medida que ya había sido adelantada por la vicepresidenta Nadia Calviño como parte del plan de choque para el sector de telecomunicaciones.

Inicio de la subasta

En cuanto a las obligaciones de cobertura, se han detallado de manera más precisa al incluir el listado con los municipios, aeropuertos, puertos, estaciones de ferrocarril y autopistas concretos a los que los operadores deben extender la cobertura con cada concesión.

Asimismo, se incluyen las fechas exactas de los hitos temporales en los que se debe cumplir con dichas obligaciones de cobertura.

La subasta comenzará antes del día 21 de julio de 2021 y se licitarán siete concesiones en total. Cuatro concesiones corresponden a dos bloques de 2x10 MHz y dos bloques de 2x5 MHz, en la banda pareada 703-733 y 758- 788 MHz para comunicaciones ascendentes y descendentes.

También se licitan tres concesiones en la banda 738-753 MHz, que asignarán cada una de ellas el uso de un bloque de 5 MHz para comunicaciones solo descendentes.

Todas las concesiones son de ámbito estatal, "dada la importancia estratégica de esta banda de frecuencias, la extensa cobertura territorial que proporciona, la necesidad de garantizar un uso eficiente del espectro, y la finalidad de evitar un despliegue irregular y fragmentado", dice el Gobierno.