Llamada de atención de la industria de la cogeneración al Gobierno. Aseguran que si no se aprueba un marco de retribución, se mueren. La crisis energética les ha pasado factura porque dependen de los precios del gas para su producción industrial, y en 2022 esta commodity llegó a dispararse por encima de los 300 euros/MWh.

"La producción de nuestras industrias cayó un 34% el año pasado y no hemos conseguido remontar, sino que siguen paradas entre el 30% y el 40% de las plantas, y esto solo lleva a un futuro: el cierre definitivo", explica a EL ESPAÑOL-Invertia Rubén V. Hernando, presidente de la patronal del sector, Acogen, y director general de la división papel para el sur de Europa de DS Smith.

Se decide el futuro no solo de la cogeneración, sino de un sector industrial puntero en este país. A la cogeneración, producir electricidad y calor a la misma vez partiendo de un único combustible, no le salen las cuentas. "Sin un nuevo marco, todas las cogeneraciones colapsarán al inicio del segundo semestre del año", añade Hernando.

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Pese a que en septiembre, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció que salvaría a la cogeneración al dejarse acoger al mismo sistema de pagos que los ciclos combinados, la realidad se impuso.

"Es cierto que en septiembre la compensación por la 'excepción ibérica' nos permitió arrancar ciertas plantas, pero luego, al volver a caer los precios del gas, en la práctica no fue aplicable la medida", explica el experto.

Cogeneración renovable

"Necesitamos una legislación que de certidumbre a la inversión porque sin ella no seremos competitivos", dice el presidente de Acogen. Su objetivo es confiar en que pueden continuar produciendo y además invirtiendo en la transición energética de sus industrias. "Podemos cambiar de gas a otros gases renovables como el biometano o el hidrógeno, queremos ser una cogeneración renovable, pero necesitamos saber que tenemos futuro", señala.

Empieza a haber proyectos piloto, pero se necesita un marco seguro y estable porque si no, "nadie pone su dinero y su esfuerzo en peligro".

Por el momento, esperan que para la primavera pueda estar aprobada una retribución a su producción que llevan esperando más de dos años, pero desconocen cuáles serán los términos con los que lo haga.

En la cogeneración hay sectores como el del papel, la industria química, la alimentación o el refino, "que van a desaparecer poco a poco si se nos retribuye en base a la volatilidad de los precios o en la de los futuros", asegura Rubén V. Hernando. Eso sin contar los efectos colaterales en el empleo, la exportación y el equilibrio económico de determinadas zonas.

Por último, el responsable de Acogen recuerda que también están a la espera de las subastas que, según anunció el Gobierno, solo iba a cubrir la mitad de la potencia existente. "Esto implica que alguien va a perder competitividad y la industria de la cogeneración supone el 11% de la electricidad nacional (50% autoconsumida), y utiliza el 20% del total del gas nacional en unas 600 fábricas", incide.

Además, el valor de la energía que produce la cogeneración supera en la actualidad los 7.000M euro/año.