Montaje sobre el Euríbor.

Montaje sobre el Euríbor. Diseño: Arte EE / EP

Banca

El interés que cobra la banca por las hipotecas ya alcanza niveles de hace una década tras el repunte del Euríbor

Se sitúa cerca del 3% por primera vez desde 2013.

22 enero, 2023 02:08

El repunte que el Euríbor ha experimentado durante los últimos diez meses ha tenido como efecto colateral un encarecimiento de las nuevas hipotecas -especialmente las fijas-. Una subida que ya se empieza a reflejar en los datos oficiales sobre los tipos de interés de los nuevos préstamos, que reflejan que los de las hipotecas están ya a niveles de hace una década.

Concretamente, la TAE media de los nuevos préstamos que se están concediendo para la compra de vivienda está en el 2,85%, según las cifras provisionales correspondientes al mes de noviembre, las últimas disponibles del Banco de España.

Este nivel supone el más elevado no solo del ejercicio pasado, sino también de los últimos diez años. No se veía una TAE tan alta en el caso de las hipotecas desde 2013, año en el que este interés cerró en el 3,16%.

[El Euríbor cierra el año por encima del 3%: el valor de diciembre encarece de nuevo las hipotecas variables]

Hace una década las cosas eran diferentes en el mercado hipotecario. La economía española asumía el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, los tipos de interés de la zona euro se encontraban ya en cero y el Euríbor a doce meses -el que se toma como referencia para el interés de las variables- se situaba en el 0,54%.

En aquel momento se concedían sobre todo hipotecas variables. Representaban el 94,1% del total, frente al escaso 5,9% de las hipotecas fijas, de acuerdo con los registros históricos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

[La cuota de la hipoteca variable sube un 30% en un año y se acerca a lo que se pagaba en 2008]

Ahora, sin embargo, el crédito inmobiliario no es un lastre para el sector bancario, que disfruta de unos tipos de interés en el 2,5% -con perspectiva de que sigan subiendo en la reunión de tipos del Banco Central Europeo (BCE) del próximo 2 de febrero- y de un Euríbor que en su media provisional de enero marca el 3,324%.

Los cambios que los seis años en negativo de este índice y, posteriormente, su repunte han provocado en el mercado han llevado a que actualmente las hipotecas variables constituyan apenas un tercio del total de la nueva producción.

Atractivo para la banca

Pero, ¿a qué se debe esta subida en los intereses de las hipotecas? A un efecto colateral del incremento del Euríbor. Durante los años en los que este índice estuvo en negativo, lógicamente, las hipotecas variables dejaron de ser interesantes para la banca, pues lo único que hacían estos préstamos era ir rebajando sus cuotas año a año (o semestre a semestre, dependiendo de cada caso).

La hipoteca fija entonces se convirtió en la favorita para el sector... y también para los clientes, que encontraban en este tipo de préstamo una predictibilidad que no ofrecían las hipotecas variables: con ellas siempre pagarían la misma cuota.

De esta forma, las hipotecas fijas pasaron de ser casi residuales a convertirse en las protagonistas absolutas del mercado, con constantes bajadas de precio. Así hasta que llegaron a ser las más baratas de la historia, en diciembre de 2021.

Cuando el Euríbor entró en negativo, en febrero de 2016, la TAE media de las hipotecas en España estaba en el 2,33%. Desde entonces bajó sistemáticamente hasta el mínimo del 1,5%, que se tocó en diciembre de 2021.

Pero todo cambió al mes siguiente. En enero de 2022 el Euríbor a doce meses empezó a dar señales de cambio de tendencia, que se confirmaron el mes posterior y se agravaron más adelante, hasta cruzar la línea del cero el 12 de abril.

En aquel momento la TAE media a la que se concedían hipotecas subió hasta el 1,647%. Y de ahí al máximo de la última década, que tocó en noviembre, el último dato disponible del Banco de España.

En los meses siguientes lo lógico sería que incidiera en esos máximos, pues desde noviembre, cuando el Euríbor cerró en el 2,83%, hasta ahora el índice no ha dejado de crecer, con algunos momentos, eso sí, de una cierta moderación.