María Jesús Montero, ministra de Hacienda y Función Pública, ha aprovechado la celebración del Consejo de Política Fiscal y Financiera para aclarar que, al menos de momento, no se ha reunido con Cataluña de manera bilateral para tratar la financiación de la región. 

"No hay negociación bilateral con Cataluña", ha expresado la también vicepresidenta cuarta, durante la rueda de prensa posterior a la celebración del Consejo. Se trata de una declaración que también ha enarbolado durante la propia reunión, según han contado los propios consejeros autonómicos. 

"La consejera (de Hacienda de Cataluña) habrá expresado su pretensión de que quiere que haya esas reuniones, pero desde luego no ha podido decir que haya habido reuniones, al menos con el Ministerio de Hacienda", ha dicho Montero, recalcando que no se ha reunido "de manera singular" con el Govern catalán para abordar la financiación.

"Creo que podemos estar muy tranquilos a pesar del acuerdo que habían firmado el PSOE y los independentistas, porque dice la vicepresidenta que quiere que conste en acta que no tienen ninguna negociación bilateral, cosa que no coincide en nada con lo que hemos visto ni en el acuerdo expreso ni en lo que nos dice la consejera de Cataluña", ha añadido la consejera madrileña de Hacienda, Rocío Albert López-Ibor, a su salida de la reunión. 

Durante la reunión, Montero ha comunicado a las regiones que el objetivo de déficit de 2024 de las comunidades autónomas será del 0,1%, una mayor capacidad de gasto que la proyectada en el plan de estabilidad de abril (que recogía equilibrio presupuestario). 

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Partido Popular

Sin embargo, todas las comunidades con gobiernos del Partido Popular o en los que participa el PP han votado en contra de este objetivo, y han reclamado el 0,2%. 

Cabe recordar que la senda de estabilidad (es decir, los objetivos del déficit y de deuda pública para los próximos años) tiene que ser aprobada tanto por el Congreso como por el Senado, tal y como ordena la Ley de Estabilidad Presupuestaria.

Con el fin de bloquear la tramitación presupuestaria, el Partido Popular ya ha amenazado en varias ocasiones con frenar su aprobación en la Cámara Alta, donde disfruta de mayoría absoluta con Vox. 

Sin embargo, Montero ha avisado de que, hacer eso, supondría para el PP "tirar piedras contra su propio tejado", o al menos contra las de sus autonomías. Si los objetivos de estabilidad no son aprobados por ambas cámaras (hay hasta dos ocasiones para hacerlo), los presupuestos de todas las Administraciones públicas se tendrán que hacer con límites de déficit y deuda que marca el programa de estabilidad de abril. 

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Menos gasto

¿Qué significa esto? Que, respecto a los objetivos presentados este lunes al Consejo de Política Fiscal y Financiera, las regiones y las entidades locales perderán capacidad de gasto puesto que las primeras tendrán que tener un déficit de cero y a las segundas se les exigirá un superávit del 0,2% del PIB. 

De esta manera, Montero asegura que no sólo no se frenarían los Presupuestos Generales del Estado (que se tendrían que adaptar al nuevo límite de déficit), sino que se limitaría el gasto de las regiones y que algunas de ellas tendrían que rehacer sus presupuestos para adecuarlos al nuevo techo de gasto. 

María Jesús Montero afirma que cuenta con un informe de la Abogacía del Estado que corrobora estos pronósticos. Por ello, espera que la senda de estabilidad supere sin altercados la tramitación tanto en el Congreso como en el Senado. 

Una senda de estabilidad que se aprueba en el Consejo de Ministros de este martes junto al techo de gasto. Unos gestos que significan la puesta en marcha definitiva del anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado. 

Condonación

Respecto a otros temas tratados en el Consejo, Montero ha explicado que las regiones han hecho consultas sobre la quita de deuda autonómica que el Estado se ha comprometido tras el acuerdo de investidura del PSOE con ERC. 

En este sentido, la vicepresidenta cuarta ha aclarado que sacar adelante esta medida no va a ser un objetivo al corto plazo. Ha avanzado que Hacienda se va a reunir a partir de enero con las regiones para abordar esta cuestión.

Cabe recordar que el objetivo de la medida es compensar a las regiones por los números rojos que generó la crisis financiera de hace 10 años. Así, se busca facilitar que las autonomías vuelvan a financiarse a los mercados. ¿La meta? Poder liquidar los mecanismos extraordinarios de liquidez.

En cualquier caso, Montero ha recordado que cuando esta condonación de deuda autonómica se apruebe, se hará en el Congreso de los Diputados. Es decir, que no va a ser cosa de una negociación entre el Estado y las regiones. 

Financiación 

Lo mismo ha dicho respecto a una posible reforma de la financiación autonómica. Tras los numerosos desencuentros de regiones con el mismo signo político, considera que son los partidos mayoritarios, PSOE y PP, los que deben gestionar esto. 

Por ello, ha llamado a que Alberto Núñez Feijóo, presidente del PP, participe en la mesa de negociación a la que le ha invitado Pedro Sánchez para abordar esto. Es decir, que sea "un acuerdo de Estado entre el PSOE y el PP". 

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Finalmente, la vicepresidenta cuarta ha descartado que los precios de los contratos del sector privado con las Administraciones públicas se puedan indexar al salario mínimo interprofesional (SMI) y sus subidas, una de las condiciones que pone la CEOE para un acuerdo. 

"No tendría ningún sentido que la subida del SMI tuviera que ser a costa de lo que pagan las administraciones. La subida no puede ser a costa de la recaudación de los españoles", ha indicado.