Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo.

Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo. Eduardo Parra Europa Press

Empleo Hoy

Ocho de cada 10 empresas tienen dificultades para cubrir vacantes a pesar de que España lidera los ranking de paro

El déficit de talento ha pasado del 55% de 2019 al 76% de 2025, según datos de Randstad Research.

Más información: La tasa de paro en España dobla las de potencias como EEUU y China y supera las de toda Latinoamérica, según el FMI

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Las claves

El 76% de las empresas españolas tienen dificultades para cubrir vacantes, un problema que ha aumentado 21 puntos porcentuales desde 2019.

El desajuste entre oferta y demanda laboral se debe principalmente al envejecimiento de la población, déficit de formación profesional y falta de adecuación entre estudios universitarios y necesidades empresariales.

A pesar de la elevada tasa de paro española, que ronda el 10,5%, muchas vacantes siguen sin cubrirse debido a la falta de candidatos cualificados y experiencia.

La mayoría de las vacantes se concentran en el sector servicios y en empresas grandes, mientras que los perfiles más demandados son los de ingeniería, informática y formación profesional de grado medio.

Casi ocho de cada diez empresas españolas tienen dificultades para cubrir vacantes, según Randstad Research. Este déficit de talento, como lo denomina el instituto de análisis de recursos humanos, contrasta con que España siga siendo uno de los países con mayor tasa de paro del mundo.

Exactamente, la proporción de empresas que experimentan dificultades para cubrir posiciones clave es del 76%. En 2019 era del 55%. Es decir, en unos seis años se ha elevado 21 puntos porcentuales.

"No hay ningún sector ni perfil profesional que escape del problema", advierte Valentín Bote, director de Randstad Research.

El desajuste entre oferta y demanda laboral se explica por tres factores clave: el envejecimiento de la población, el déficit de formación profesional y la falta de adecuación entre los estudios universitarios y las necesidades del tejido productivo.

El primer factor que provoca ese déficit de talento es puramente cuantitativo: llegan menos trabajadores al mercado laboral.

Por un lado, la población en edad laboral en la franja de 55 a 64 años ha aumentado en 2,3 puntos en una década. Por el otro, por cada cien personas que en los próximos diez años dejará de estar en edad laboral sólo entrarán 73 jóvenes.

La segunda razón, tal y como señala Bote, es la falta de preparación adecuada. "Hay un desajuste entre el tipo de perfil profesional que las empresas demandan y lo que nuestro sistema educativo genera", explica.

A pesar del aumento del alumnado en los últimos años, persiste un "déficit crónico" de titulados en formación profesional.

Según Randstad Research, sólo el 9% de los jóvenes españoles de entre 25 y 29 años llega al mercado laboral con un perfil de formación profesional de grado medio. La cifra está muy por debajo de la media de la Unión Europea (UE), que es del 31%.

En el ámbito universitario, la escasez de titulados en ingeniería e informática agrava el problema, ya que son los perfiles más demandados por las empresas.

La Encuesta de Desajustes del Observatorio de las Ocupaciones desarrollada por el Sepe revela que las principales causas de este desajuste del mercado laboral son la falta de candidatos (25%) y la falta de experiencia (19%).

Le siguen los desacuerdos en las condiciones laborales y la falta de competencias técnicas.

Según la misma encuesta, la dificultad para cubrir vacantes es muy alta en un 52% de los casos. En el 20% de los mismos, "la cobertura es imposible".

"Esto refleja un problema estructural en el mercado laboral, donde no hay suficientes personas con las habilidades requeridas", señala el propio Sepe.

La Encuesta Trimestral de Coste Laboral (ETCL) del segundo trimestre arroja que a cierre de junio había en España 149.739 vacantes. Supone un ligero descenso, del 1,08%, respecto al mismo periodo del año anterior.

Sin embargo, las vacantes de empleo se han incrementado un 39,3% frente al segundo trimestre de 2019.

El sector servicios concentra la mayoría (132.487 vacantes), seguido de la industria (11.268) y la construcción (5.984). Por tamaño, las empresas de más de 200 empleados reúnen 58.794 vacantes, mientras que las de 50 a 199 suman 40.626 y las de menos de 50, unas 50.319.

La tasa de paro, en el 10,5%

La imposibilidad de las empresas para contratar ciertos perfiles contrasta con la elevada tasa de paro de España, que se ha estancado en torno al 10,5%. Hay 2,44 millones de personas en situación de desempleo.

De hecho, según los datos del Fondo Monetario Internacional (FMI), España es y será en los próximos años una de las economías con más desempleo del mundo.

Nuestro país lidera el paro en la UE –en Europa sólo la tasa de desempleo de Ucrania es superior– y dobla el registrado en grandes economías como Estados Unidos, Reino Unido y China.

La tasa de paro española es también muy superior a la de varias economías emergentes y en vías de desarrollo. De hecho, es más elevada que la de todos los países de Latinoamérica de los que FMI hace previsión de paro y de varios asiáticos, como Irán, Pakistán o Egipto.

Según cálculos de Randstad Research, dos tercios de los 3 millones de desempleados en "paro efectivo" -el paro registrado (2,4 millones de personas) más los demandantes de empleo con relación laboral- no tienen cualificación universitaria ni de formación profesional.

"Es muy problemático porque en España el 100% del empleo creado en los últimos años ha sido absorbido por trabajadores con cualificación alta o media. No se está creando empleo nuevo para trabajadores sin cualificación", señala Bote.

Y advierte de que "incluso si tienen cualificación universitaria puede no encajar con lo que las empresas están buscando".

Así, si la tasa de paro de España es del 10,5% se eleva hasta el 19,2% en el caso de aquellos desempleados sólo con formación primaria. A su vez, se reduce al 6,7% entre la población con educación superior.