A pesar del importante impacto que ha tenido la Covid en la población española y en determinados colectivos como el sanitario (disparando sus fallecimientos), el reconocimiento de estos fallecimientos como accidente mortal en el trabajo es inesperadamente bajo. 

Según el dato revelado por el Gobierno, en 2020 se reconoció que 31 personas fallecieron teniendo como causa directa la Covid y entendida como un siniestro laboral. 27 de ellas trabajaban en el sector sanitario y sociosanitario. A estas cifras se suman seis personas más en 2021. 

Sin embargo. fuentes del Instituto de Seguridad y Salud en el Trabajo aclaran que estos datos deberían aumentar en los próximos meses. Indican que, seguramente, haya casos pendientes de ser reconocidos (labor que depende de la Seguridad Social) o incluso en los tribunales, por lo que estas cifras subirán en los próximos meses. 

Precisamente el rebajar las cifras de siniestralidad laboral mortal es uno de los objetivos del Ministerio de Trabajo para 2022. Este jueves, la ministra y vicepresidenta Yolanda Díaz ha presentado un plan de choque contra los accidentes mortales en el trabajo. 

Entre 2017 y 2019 se produjeron 1.626 accidentes mortales en centros de trabajo, y la idea es rebajar la cifra todo lo posible. A partir del estudio de dichos accidentes, el Ministerio ha seleccionado una serie de sectores especialmente afectados para llevar a cabo una campaña de inspecciones, diseñada a través del cruce de datos usando inteligencia artificial. 

Los más expuestos

Según los datos del Instituto de Trabajo, los trabajadores más expuestos a accidentes mortales son los de transporte por carretera y mudanzas, construcción y actividades relacionadas (como electricidad o fontanería), pesca y sector agrario y recogida de residuos.

La inspección laboral pondrá un ojo especial en estos sectores, especialmente en empresas con una elevada siniestralidad, aunque no se hayan producido accidentes mortales. Son en las que concurren más posibilidades de que haya este tipo de incidentes. 

Carmen Collado, directora general de la Inspección, ha recordado que las sanciones a las empresas por este tipo de accidentes (muy graves) pueden llegar a casi un millón de euros. Además de que, en caso de fallecimiento, hay un recargo de las prestaciones por el siniestro "exclusivamente para el empresario", ha añadido. 

Además, según los datos de Trabajo, el sector de empresas de trabajo temporal es uno de los más afectados por los siniestros mortales. "La precariedad puede matar. Acabar con ella puede acabar en una mejora de la salud laboral", ha incidido la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo Yolanda Díaz.