La presidenta de AIReF, Cristina Herrero

La presidenta de AIReF, Cristina Herrero Jesús Hellín / Europa Press

Economía

La quita de deuda autonómica ahorraría a las CCAA un gasto de entre 1.688 y 2.000 euros por habitante

La AIReF estima que el ahorro de intereses se situaría en 2.532 millones de euros al año y hasta 15.657 hasta 2030.

Más información: El “riesgo moral” de la quita: el Estado concentra el 60% de la deuda autonómica con Cataluña y Valencia a la cabeza.

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Las claves

La AIReF calcula que la quita de deuda autonómica supondría un ahorro de entre 1.688 y 2.000 euros por habitante para las comunidades autónomas.

Las comunidades más beneficiadas por la medida serían las más endeudadas: Cataluña, Valencia, Murcia, Andalucía y Castilla-La Mancha.

El recorte medio de deuda sobre el PIB regional sería de 5 puntos, y el ahorro en intereses alcanzaría hasta 15.000 millones de euros hasta 2030.

La aplicación de la medida depende de la aprobación de una reforma de la financiación autonómica y del cumplimiento de objetivos fiscales y de estabilidad presupuestaria.

La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha analizado el plan del Gobierno para asumir parte de la deuda autonómica con una estimación básica: el gasto que las CCAA se ahorrarían estaría entre 1.688 y 2.000 euros por habitante.

Todo depende del nivel de deuda que acumule cada CCAA y de la parte que se centre con los mecanismos de financiación del Gobierno. Las más endeudadas -Cataluña, Valencia, Murcia, Andalucía, Castilla-La Mancha- son las más beneficiadas.

En términos generales, la quita de deuda supondrá un recorte medio de 5 puntos de deuda sobre PIB para todas las regiones, repartido de forma muy dispar. Si se aplican criterios de población ajustada, el ahorro por habitante es desde 1.800 hasta casi 2.300 euros.

Esa reducción, junto con las normas más flexibles de financiación que prepara el Gobierno, abren la opción de endeudarse a casi todas el año que viene, con condiciones.

No se trata de que los ciudadanos vayan a ahorrarse dinero con la quita de deuda de forma directa. Es el gasto de las CCAA lo que se recorta, para aplicar un saneamiento más rápido a sus presupuestos.

De hecho, las estimaciones de la AIReF calculan que el ahorro en intereses que ese proceso va a generar estará en 2.532 millones al año, y podrá llegar a más de 15.000 millones hasta 2030. Una cantidad superior a la que estima Hacienda, porque incluye además los intereses acumulados y no gastados.

No obstante, todo está supeditado a que el Estado logre aprobar una reforma de la financiación autonómica, tras aplicar la quita de deuda. Y faltaría por conocer el objetivo de déficit y deuda de todas las administraciones públicas.

La deuda autonómica en la actualidad supone el 20,9% de su PIB, por encima del límite del 13% que hasta el momento se había establecido para poder emitir deuda en los mercados financieros. Las nuevas normas extraordinarias de financiación, pendientes de aprobar, lo elevan al 19,5% a partir de 2026.

De hecho, sólo seis CCAA emitieron valores en el mercado primario en 2024: Andalucía, Canarias, Galicia, País Vasco, Navarra y Madrid.

Si se consigue sacar adelante la quita de deuda, nueve autonomías estarían por debajo del 13,4%, sin problemas para emitir. Otras cuatro estarían en el entorno del 14%. Valencia seguiría siendo la más endeudada, con un 32,5%, y Cataluña, Murcia y Castilla-La Mancha superarían el 20%.

Fuentes de la AIReF advierten que la emisión futura de deuda que hagan las CCAA dependerá siempre del plan fiscal y el compromiso de estabilidad financiera que se establezca para cada una de ellas.

Todas las CCAA tienen grado de inversión (calificación) para salir a los mercados. Pero deben cumplir con la estabilidad presupuestaria, una deuda menos del 19,5% del PIB para 2026-2028, y cumplir con el límite de pago a proveedores.

Aún así, el Estado tendrá siempre la opción de supervisar el margen fiscal que cada CCAA pueda aplicar a la hora de endeudarse en los mercados financieros.

Si la reforma de la financiación no sale adelante y el límite oara endeudarse se mantiene en el 13% del PIB, la cosa empeora. El conjunto de las autonomías no llegarían a esa media hasta el 2041 y comunidades como Cataluña, tendrían que esperar a 2050.