Una cesta de la compra con distintos productos.

Una cesta de la compra con distintos productos. Freepik.

Economía

Cómo cambia la cesta de la compra en 20 años: un 131% más de platos preparados y menos carne, pescado o pan

Sube el consumo de tartas y helados, salchichas, tocino y manteca, frutas y verduras. Más ultraprocesados, y más veganos y vegetarianos.

30 octubre, 2022 02:42

La cesta de la compra ha variado sustancialmente en España en los últimos 20 años. Los platos preparados se han disparado un 131% hasta alcanzar casi los 17 kilos por persona al año, al igual que han ganado peso las frutas, hortalizas, tartas y helados.

El pan ha perdido relevancia en la alimentación con 20 kilos menos por persona al año, el consumo de carne ha descendido en ocho kilos y el pescado en cuatro, según los datos consultados en el Ministerio de Agricultura relativo a 2021 y 2001.

"Día a día, la oferta de productos ultraprocesados va en aumento, cada vez podemos encontrar en el mercado una mayor variedad y a un precio muy bajo, mientras que en general ha bajado el consumo de productos frescos. Obviamente, no podemos olvidarnos que los determinantes sociales son muy importantes y determinan la cesta de la compra", explica a EL ESPAÑOL-Invertia el nutricionista Daniel Ursúa.

Una mujer compra carne en un supermercado.

Una mujer compra carne en un supermercado. Jesús Hellín (Europa Press).

Una de las secciones en las que más ha cambiado nuestra cesta de la compra ha sido la carnicería. El consumo de carne ha pasado de ser de 53 kilos al año por persona a los 45 de la actualidad

Todas las variedades de carne caen, pero hay una que lo hace en mayor medida: la de ovino y caprino. Ahora comemos un 62% menos de estos animales que en 2001. Le sigue el conejo con un 44% menos; un 23% menos de vacuno, un 18% menos de pollo y un 16% menos de cerdo.

La compra de tocino se dispara

Dentro de la carnicería las elecciones también se han modificado. En 2001, llenábamos nuestra cesta de la compra con más pollos enteros, mientras que ahora preferimos comprar el pollo por piezas.

Por su parte, el consumo de filetes sí crece. Comemos más de siete kilos de filetes de este ave frente a los seis del comienzo de los 2000.

Diferentes tipos de salchichas, longanizas y morcillas.

Diferentes tipos de salchichas, longanizas y morcillas.

Aunque ahora elegimos menos productos en la sección de la carne, sí que hemos disparado nuestro consumo de tocino y manteca en un 139% hasta alcanzar los 390 gramos y casi un 50% el de salchichas.

Las empresas del sector tienen asumida que la tendencia es a la baja y lo achacan, sobre todo, al mayor interés por el bienestar animal. "Hay un descenso general de carnes y embutidos y va asociado al auge de veganos y vegetarianos", explica a este diario Ignasi Pons, de la Federación Empresarial de Carnes e Industrias Cárnicas.

Boquerones en una pescadería.

Boquerones en una pescadería. Pixabay.

La parte de la cesta de la compra dedicada al pescado también ha perdido peso: ahora comemos casi tres kilos menos que hace 20 años. De media, cada español consume unos 22,72 kilos de pescado anuales, frente a los 26,70 de 2001.

Seguimos consumiendo más pescado fresco que congelado, aunque el consumo del primero baja casi un 30%, hasta los 9,63 kilos por persona, y el del segundo se sitúa en los 2,27 kilos.

Adiós al boquerón y hola al salmón

Ahora comemos mucho menos merluza (2,24 kilos), el consumo de los boquerones y sardinas desciende más de un 50% y no llegamos ni al kilo y medio por persona al año. Por el contrario, se ha puesto de moda llenar nuestra cesta con otras especies como el bacalao (con 1,21 kilos frente a los 0,60 de 2001) y el salmón, variedad estrella que duplica sus ventas en este periodo.

El consumo de conservas ha crecido un 23% y ahora gastamos 4,52 kilos de este producto, mientras que nuestras compras de mariscos y moluscos permanecen estables por encima de los seis kilos anuales.

Un estante con conservas.

Un estante con conservas. Pixabay.

Al igual que ocurre con la carnicería, las visitas a la pescadería cada vez son menores. "Reclamamos una reducción del IVA de los productos pesqueros desde el 10% actual al 4% como el que grava otros alimentos básicos para alimentación como el pan, los huevos, la leche y los quesos, las frutas y las verduras o las legumbres", reclama Javier Garat, secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca).

"En el caso de los animales, cada vez hay un mayor porcentaje de la población que opta por dietas vegetarianas o veganas o que, simplemente, opta por reducir el consumo de este tipo de productos", añade el dietista Ursúa para justificar la caída de productos como la carne, el pescado, la leche o los huevos.

Menos leche, huevos y pan

La leche ha perdido peso en nuestra cesta, ahora consumimos 26 litros menos. Una suerte similar es la que ha corrido el pan con un descenso de 20 kilos por persona al año. Cada español ha pasado de consumir 50 kilos de pan en 2001 a los 30 de 2021.

A pesar de su fuerte reducción, comemos el doble de pan industrial que hace veinte años y su consumo ya supone el 20% del total. De su lado, los huevos también pierden fuerza en la alimentación con una reducción de 23 unidades anuales por persona. 

[Una dieta más variada y más salidas a restaurantes hacen caer el consumo de pan en 20 kilos al año]

Por el contrario, las compras en las fruterías cogen fuerza. Ahora consumimos cuatro kilos más de frutas frescas y las hortalizas aumentan en cinco kilos anuales. De media, cada español consume 91,80 kilos de frutas y 57,94 de verduras.

En la frutería, ganan peso las cebollas, pepinos, champiñones, espárragos (crecen más del doble) o los pimientos en detrimento de ajos, judías verdes, naranjas o peras. El consumo de patatas cae un 6,53% en 20 años, situándose por debajo de los 30 kilos por persona.

Una cesta de patatas.

Una cesta de patatas.

También ganan mucho peso en las cestas y carritos de la compra los platos preparados. En 20 años, su consumo se ha incrementado un 131,31%, hasta alcanzar los 16,77 kilos por persona. Los consumidores reparan mucho más en los estantes de las sopas y cremas y consumen, de media, un 128% más hasta alcanzar los seis kilos.

También se incrementa el consumo de pizzas un 126% y las salsas ganan terreno sumando un 69,59% más. Los helados y tartas suben un 80%, los quesos un 30% y la bollería, pastas y cereales, un 20%