Nueva York, 19 dic (EFECOM).- La entidad financiera Goldman Sachs negocia con el gobierno de Estados Unidos para afrontar una multa multimillonaria y admitir su culpabilidad por un caso de corrupción en Malasia vinculado al blanqueo de capitales.

La multa podría ascender a 2.000 millones de dólares y supondría que la firma bancaria admitiese que desoyó las advertencias mientras uno de sus clientes, un fondo malasio llamado 1MDB, saqueaba y blanqueaba importantes cantidades de dinero, informó The Wall Street Journal.

Sin embargo, será una filial de Goldman Sachs afincada en Asia, y no la compañía matriz, la que admitiría los cargos por haber violado las leyes antisoborno estadounidenses.

Este acuerdo no está vinculado con las acciones penales que están llevando a cabo las autoridades malasias y que podría aumentar el coste de este escándalo para Goldman Sachs.

La filial del banco estadounidense recaudó 6.500 millones de dólares para el fondo 1MDB, abreviación de 1Malaysia Development Bhd, cantidad que según las autoridades pudo haber sido robada por un asesor del gobierno de Malasia llamado Jho Low y dos banqueros de Goldman Sachs, según las investigaciones.

Low se encuentra prófugo del sistema de justicia penal estadounidense.

Además, los investigadores añaden que el banco desoyó las advertencias de lo que sucedía con el objetivo de recaudar comisiones que ascendían hasta 600 millones de dólares.

En cuanto a los dos banqueros implicados, uno de ellos se ha declarado culpable de haber robado más de 200 millones de dólares y ha accedido a ser suspendido de por vida del sector de valores.

El banquero malasio Roger Ng se ha declarado inocente en Nueva York a la par que se enfrenta a cargos penales en Malasia.