(Actualiza la subida en Bolsa al cierre de la sesión y añade datos)

Fráncfort (Alemania) 27 jun (EFECOM).- El grupo químico y farmacéutico alemán Bayer se ha disparado en bolsa tras la entrada en el accionariado del fondo de cobertura Elliott y después de asumir responsabilidad respecto al glifosato y crear un comité para afrontar procesos judiciales y buscar, probablemente, acuerdos extrajudiciales.

Las acciones de Bayer ganaron este jueves en la Bolsa de Fráncfort un 8,7 %, hasta 60,86 euros.

El fondo de cobertura Elliott del multimillonario estadounidense Paul Singer se ha hecho con una participación por valor de 1.100 millones de euros, cantidad que representa un 2 % del valor actual de Bayer en Bolsa.

Este "hedgefund" es conocido por su agresividad con el comité ejecutivo de las empresas en las que entra, entre las que se encuentran, entre otras, ThyssenKrupp y la energética Uniper, en las que ha logrado llevar a cabo cambios.

Bayer informó este miércoles de que ha creado un comité en el consejo de supervisión, donde están representados los accionistas y los trabajadores de la empresa, para tratar los pleitos por el glifosato, compuesto que se encuentra en el herbicida RoundUp de Monsanto, compañía que adquirió hace un año.

Elliott valoró la creación de este comité, pero en su comunicado criticó los bajos rendimientos de Bayer y, como ya han hecho otros inversores, aludió como solución una división de la compañía, por un lado la parte agroquímica y por otro la farmacéutica.

La dirección y el consejo de supervisión de Bayer han celebrado el proceso de mediación que realiza el abogado estadounidense Ken Feinberg en los casos relacionados con el glifosato y han nombrado un nuevo asesor.

Un juez estadounidense ordenó a finales de mayo a Bayer una mediación a cargo de Feinberg en los procesos contra el glifosato.

Bayer considera que "la mediación es positiva" y colaborará de forma constructiva en el proceso de mediación.

Feinberg es un abogado muy prestigioso en EEUU, que negoció las indemnizaciones administrativas para las víctimas de los atentados del 11 de Septiembre, por los vertidos de petróleo de BP en 2010 en el Golfo de México y para los afectados por la manipulación de las emisiones de los motores diésel en Volkswagen.

En la junta general, celebrada hace dos meses, los accionistas no exculparon a la junta directiva, ni a su presidente, Werner Baumann, de su responsabilidad en la compra de Monsanto hace un año por 63.000 millones de dólares (unos 55.410 millones de euros al cambio actual).

Las acciones de Bayer han caído un 41 % en Bolsa desde la compra del fabricante de transgénicos estadounidense y después de que tres Tribunales en California sentenciaran que el glifosato es cancerígeno y que la empresa debe pagar elevadas indemnizaciones.

Las acciones de Bayer, que ha recurrido las sentencias y defiende que el glifosato no es cancerígenos si se usa como indica el fabricante, costaban 52 euros a comienzos de junio, el valor más bajo desde 2012.

Con una capitalización bursátil de unos 54.000 millones de euros, el valor de Bayer en Bolsa es menor de lo que pagó por Monsanto, adquisición que le ha generado 13.400 demandas en EEUU por el glifosato.

El consejo de supervisión de Bayer reconoce los efectos negativos que tiene en el valor de las acciones la incertidumbre relacionada con los procesos judiciales por el glifosato.

Por ello ha creado un comité, que estará integrado por ocho miembros del consejo de supervisión, que se ocupará de los litigios, aconsejará a la junta directiva y realizará recomendaciones sobre la estrategia a seguir.

Bayer ha contratado también al abogado estadounidense John Beisner como asesor del consejo de supervisión en las complejas cuestiones jurídicas relacionadas con el glifosato.

Beisner dirige un departamento en el prestigioso bufete de abogados Skadden en Washington y tiene experiencia en procesos con empresas multinacionales, tanto en su defensa judicial como en el logro de acuerdos extrajudiciales.