Broadcom abrirá una fábrica de semiconductores en España con una inversión de 900 millones de euros

Broadcom abrirá una fábrica de semiconductores en España con una inversión de 900 millones de euros

España

El sector pide reformar la normativa europea de chips después de que España se quede sin la fábrica de Broadcom

La tecnológica ha cancelado sus planes después de que las negociaciones con el Gobierno llevasen paralizadas durante meses.

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Finalmente, parece que la fábrica de microchips de Broadcom no llegará a España. La multinacional estadounidense de circuitos integrados ha rechazado construir esta infraestructura en el país después de que se rompiesen las conversaciones entre la firma y el Gobierno, según han confirmado a Europa Press fuentes conocedoras de la situación.

El proyecto habría supuesto una inversión de 1.000 millones de dólares (850 millones de euros al cambio actual), de acuerdo con las estimaciones iniciales, y, aunque no se dio a conocer cuál sería el lugar concreto donde se ubicaría esta planta, las suposiciones de los últimos meses avanzaban que se alojaría en Zaragoza.

Entre las razones detrás de la retirada de la tecnológica se citan un estancamiento de las negociaciones. En un primer momento, el anterior ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, José Luis Escrivá (actual Gobernador del Banco de España), sí que negoció de forma activa con Broadcom para definir la localización de la fábrica, pero, con el avance de los meses, estas quedaron en punto muerto y apenas se volvió a saber nada de las mismas.

Posteriormente, con la llegada de Óscar López, el sustituto de Escrivá al frente de dicha cartera, estas ya llevaban tiempo paralizadas y, de hecho, según confirman las mismas fuentes consultadas a Europa Press, nunca llegó a sentarse a la mesa con la multinacional estadounidense.

A ello se suma que, en este período de tiempo, fue reelegido como presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cuyo mandato empezó este mismo año. Así, se cree que la llegada de Trump al gobierno estadounidense dificultó aún más el impulso a este proyecto, debido al enfrentamiento continuado entre el magnate y el territorio europeo. De hecho, el mandatario ya tumbó otro proyecto para la creación de una 'joint venture' con una empresa norteamericana para producir chips en España en la que el Gobierno tenía previsto invertir hasta 400 millones de euros.

Preguntado por DISRUPTORES, el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública no ha querido hacer ninguna declaración al respecto.

“Urge una reforma profunda”

Las reacciones del sector a esta noticia no se han hecho esperar. Entre ellas, destaca la de AESEMI, la Asociación Española de la Industria de los Semiconductores, que ha “lamentado profundamente” la decisión de la tecnológica de no seguir adelante con la inversión. Según han precisado, esta decisión “subraya la imperiosa necesidad de revisar y agilizar los mecanismos que rigen la atracción de inversiones de esta magnitud”.

La entidad señala que estaba convencida de que esta “sería la primera de muchas propuestas exitosas de agentes internacionales”.

Desde AESEMI apuntan que esta situación pone de manifiesto “la urgencia de una reforma profunda de la normativa europea de chips” para avanzar hacia un marco jurídico “ágil y atractivo” que garantice la competitividad en la región comunitaria. “Necesitamos mecanismos que no solo ofrezcan seguridad a las inversiones, sino que las aceleren al máximo, eliminando barreras y burocracia que puedan disuadir a compañías estratégicas”, insisten.

Además, creen que es imprescindible apostar por una mayor estabilidad en las relaciones internacionales para fomentar un entorno de inversión seguro, especialmente, en un sector tan globalizado como el de los semiconductores. Así, instan a avanzar en una industria comunitaria mediante la creación de una “política industrial común” que coordine los esfuerzos y permita avanzar hacia los objetivos de autonomía estratégica.

“Si no se apuesta decididamente por un mercado industrial común en Europa, independientemente de las capacidades individuales de los gobiernos, fracasaremos en la lucha global por el liderazgo en la industria de los semiconductores”, afirman. Por ello, hacen un llamamiento a las instituciones europeas y al Gobierno español para que colaboren “estrechamente” en la creación de un entorno que “facilite y acelere” la llegada de proyectos como “el que hoy se escapa”.

Una apuesta estratégica

La construcción de la fábrica de microchips por parte de Broadcom fue anunciada por el presidente del grupo de Soluciones de Semiconductores de la firma, Charlie Kawwas, en el verano de 2023, tras reunirse con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

El Ejecutivo celebró esta decisión que, según explicaron, se traduciría en una fábrica a gran escala de semiconductores “back-end”, única en Europa, que jugaría un papel estratégico en el fortalecimiento de esta industria en España y, a la vez, impulsaría la penetración en este nicho de mercado de la compañía.

Además del Ministerio de Transformación Digital, en las conversaciones con Broadcom también participó el Comisionado Especial para el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica de Microelectrónica y Semiconductores (el llamado PERTE Chip), Jaime Martorell.