Aprovechar la experiencia en un determinado ámbito tecnológico para amplificar su onda expansiva, beneficiar a otros sectores y conseguir un mayor retorno. Ese es el objetivo de la nueva estrategia que va a emprender el departamento de Ingeniería Biomédica del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC).

Este organismo, dependiente del gobierno de Canarias a través de la consejería de Economía, Conocimiento y Empleo y de la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información (ACIISI), ha consolidado su potencial en fabricación aditiva (impresión 3D) en el sector sanitario y ha decidido mirar más allá y servir de apoyo también a la industria.

La transversalidad de esta tecnología hace que, evidentemente, sea de aplicación a muchos sectores, de ahí que el gobierno canario haya decidido poner una marcha más en este departamento del ITC.

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La consejera Elena Máñez y el director de la ACIISI, Carlos Navarro, visitaron recientemente las nuevas instalaciones de este departamento de Ingeniería Biomédica, trasladadas a la sede de Pozo Izquierdo, en Gran Canaria.

Allí pudieron conocer y mostrar el soporte tecnológico que ofrece esta área de ingeniería de fabricación de componentes médicos para el sector productivo de las islas. Estuvieron acompañados por el gerente del centro, Gabriel Megías, por el coordinador de I+D+i, Gonzalo Piernavieja, y por el responsable del área, Donato Monopoli.

Con algo más de 500 metros cuadrados de superficie y una inversión cercana al millón de euros en equipamiento de última generación, este centro de mecanizado industrial y electromecánica avanzada, especializado desde 1999 en la fabricación aditiva de implantes de titanio poroso para reconstrucción ósea va a ampliar sus capacidades.

Esa capacidad de fabricación mecánica de precisión va a evolucionar hacia la fabricación de piezas funcionales de alto valor añadido y prototipados, de mayor tamaño y con nuevos materiales (aluminio, acero, Inconel..).

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Desde aquel año 1999, el departamento suma más de 350 intervenciones realizadas en humanos (diseño 3D personalizado) y más de 20.000 dispositivos implantados en veterinaria (fabricación en serie), lo cual hace que su experiencia esté sobradamente demostrada.

La consejera Máñez, también presidenta del ITC, destaca "la ventaja competitiva que supone para Canarias contar con un centro especializado en ingeniería de fabricación avanzada, del que podrá beneficiarse el sector privado y que nutrirá a otros ámbitos de investigación en las islas, permitiendo consolidar un ecosistema competitivo de ciencia y tecnología con retorno productivo".

Así pues, el refuerzo de las capacidades tecnológicas de este centro público no se circunscribe al área biomédica y redundará en el fortalecimiento y crecimiento de las industrias locales y en el desarrollo de sectores altamente tecnificados (aeronáutica, biotecnología, hidráulica, agroalimentación) y, por ende, en la generación de empleo de alta cualificación.

De hecho, el área de Ingeniería Biomédica del ITC, de reconocida proyección nacional e internacional y que cuenta con seis patentes internacionales en su haber, trabaja ya en la transferencia del conocimiento en técnicas de diseño y fabricación de piezas metálicas a otros sectores tecnológicos.

Es el caso del proyecto Aquasost, consistente en el refuerzo de las capacidades de I+D+i en materia de gobernanza y de eficiencia hidráulica y energética de las tecnologías de transporte y tratamiento del agua.

Sabrán los lectores de D+I que la región canaria es una de las más punteras en relación a la tecnología aplicada a la economía azul (la relacionada con el agua). Este proyecto confirma no sólo este mimo especial hacia este sector sino su vocación de seguir abriendo nuevas vías de investigación y de aplicación tecnológica.

Otros proyectos

El proyecto está subvencionado con 963.214,90 euros por la ACIISI, a través del Programa Operativo FEDER Canarias 2014-2020, con el objetivo de producir localmente los componentes necesarios para el funcionamiento de redes hidráulicas, plantas de tratamiento de aguas, etc.

Junto a la subvención de Aquasot, la Consejería de Economía, Conocimiento y Empleo del Gobierno de Canarias impulsa la actividad del ITC en este ámbito a través de la inversión en equipamiento para activar servicios singulares y estratégicos para la mejora de la competitividad y calidad de las empresas de los sectores agroalimentario y la biomecánica.

En este último caso, mediante la subvención de importe 69.883,33 euros concedida al proyecto Dinámica, se pretende investigar y desarrollar un sistema implantable dinámico para la reconstrucción quirúrgica de defectos críticos de hueso y cartílago en la pared torácica que permita restablecer una respiración postquirúrgica de tipo fisiológico.

Y es que el departamento de Ingeniería Biomédica del ITC no se olvida de sus orígenes en el ámbito asistencial sanitario, a pesar de esa ampliación de horizontes.

Estas iniciativas conllevan la creación de dos nuevos puestos de trabajo en esta área, junto a otras tres nuevas incorporaciones de personal con cargo al Programa INVESTIGO del Servicio Canario de Empleo, y cuyo objetivo es facilitar la contratación de personas jóvenes, demandantes de empleo, en entidades científicas y tecnológicas para desarrollar proyectos de investigación e innovación.

A lo anterior, se une el incremento del equipo de Osteobionix (y su marca comercial Biosurgex para veterinaria), spin-off del propio ITC, que ha contratado a siete personas y una más, autónoma, para afrontar esta expansión.