El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha reconocido este lunes que la economía española se encamina a cerrar el primer trimestre del año en negativo y ha advertido de la necesidad de mantener las políticas económicas de apoyo a todos los niveles para evitar que esta crisis provocada por la pandemia acabe afectando al sector financiero, lo que lastraría la recuperación.

A la espera de que su Departamento de Economía y Estadística presente mañana, martes, sus previsiones económicas, De Cos ha avanzado que como consecuencia de las medidas que restringen la movilidad, el PIB español podría estar todavía en estos momentos nueve puntos porcentuales por debajo del hace un año.

La esperanza, ha dicho, es el "desarrollo de las vacunas", pero hasta que hagan efecto es necesario mantener activo el arsenal de las distintas políticas económicas (nacional, europea e internacional; monetaria, prudencial y fiscal).

Hernández de Cos ha inaugurado el l Simposio del Observatorio de las Finanzas, un encuentro organizado por Invertia en su primer aniversario dentro de EL ESPAÑOL y que hasta el 25 de abril reunirá a los principales actores del sector financiero.

Durante su intervención, el gobernador se ha centrado en los desafíos que afronta la banca española tras un año en el que la economía ha sufrido la mayor contracción del

PIB en tiempos de paz como consecuencia de una pandemia que ha afectado de forma desigual a la banca en función de los sectores y zonas geográficas a las que están expuestas las entidades.

Sin embargo, pese a las dificultades, De Cos ha resaltado que el sector bancario "ha mostrado una resistencia muy significativa". Y ha vinculado esta capacidad al enorme esfuerzo que ha hecho en la última década en la que se ha sometido a una reestructuración que es palpable en la reducción de los balances bancarios, el número de oficinas o en el empleo destruido en el sector.

Entre los datos que ha subrayado figura la evolución de la tasa de mora en los últimos años en los que ha descendido en nueve puntos frente al pico de la crisis financiera, hasta situarse en niveles del 4%.

El gobernador del Banco de España, en el I Simposio Observatorio de las Finanzas. Pablo Moreno.

Sin embargo, siendo conscientes de que volverá a subir, predecir a dónde puede llegar en este momento es complicado debido a que el contexto macroeconómico muestra "una recuperación incompleta, gradual e incierta".

Al igual que ocurre con la morosidad, el esfuerzo del sector en los últimos años también se ha visto reflejado en su solvencia, desde el año 2007 hasta antes de la llegada de la Covid-19 había mejorado en un 35% en términos de capital 'Tier 1', desde los 158.000 millones de euros (2007) a 214.000 millones (2019).

El peor escenario

El sector bancario se somete de forma periódica a test de estrés llevados a cabo por los supervisores. Sin embargo, De Cos ha reconocido que en ni en el escenario más adverso de esos exámenes se contemplaba una caída del PIB del 11%, como la que sufrió España el pasado año. Sin embargo, la resiliencia que ha demostrado la banca en este tiempo tiene una explicación.

"Que el sector se haya mostrado resistente en la crisis no tiene que ver solo con que estuviera mejor preparado sino que también se debe a la contundencia de la respuesta de la política económica, fiscal y monetaria", ha reconocido. Y por ello, ha destacado la importancia de mantener estas políticas de apoyo en los próximos meses, hasta que la recuperación tome forma por las vacunas.

Reducir el apoyo público en este contexto puede traducirse en que las entidades comiencen a reducir el crédito, lo que provocaría un "círculo vicioso" que complicaría aún más la recuperación, como se aprendió hace una década. Así, en su opinión, es vital evitar una crisis financiera en una economía como la española, altamente dependiente del crédito.

Apoyo del BCE

En este contexto, ha destacado que el arsenal activado por el Banco Central Europeo (BCE) ha sido "particularmente importante para países como España, que partían de un margen fiscal inferior" al de otros por su elevado nivel de deuda pública y déficit público.

Dentro de estas políticas, las operaciones de financiación LTRO "han evitado problemas de liquidez y han incentivado la concesión de crédito para la economía española"

En la política económica nacional, De Cos ha destacado que las medidas para facilitar el acceso a la financiación de empresas y hogares ha sido acertada y ha señalado que para activarlas, "el sector bancario ha sido fundamental".

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, durante su discurso en el I Simposio Observatorio de las Finanzas. Jesús Umbría.

Ahora, es clave focalizar las ayudas sobre todo en los sectores más afectados y vigilar la solvencia del tejido productivo español.

Con este complejo escenario, el gobernador ha reclamado prudencia a la banca a la hora de evaluar los riesgos de crédito y también en el reparto de los dividendos.

En este sentido, ha recordado a la banca que en este momento los efectos de la pandemia "todavía no están en los balances" del sector, ya que "los deterioros crediticios van con retraso", entre otros, por el fuerte apoyo público a la economía.

El gobernador del Banco de España ha inaugurado el I Simposio del Observatorio de las Finanzas de Invertia y EL ESPAÑOL justo después de recibir la bienvenida del presidente ejecutivo y director del periódico, Pedro J. Ramírez, que también ha hecho un repaso a la difícil situación económica que afrontamos y el papel del sector bancario y asegurador.

Ramírez ha advertido que desde el punto de vista de las empresas el panorama económico es "inquietante" ante la dura caída del PIB sufrida en el último año y el aumento de la deuda pública y el déficit. Sin embargo, ha querido lanzar un mensaje de optimismo por las vacunas.

El director de EL ESPAÑOL ha destacado que "vacunar" es clave para "salvar el verano" y permitir que a partir del segundo semestre de 2021.

Este I Simposio de las Finanzas se está celebrando en el auditorio de la Universidad Camilo José Cela. En la apertura de las jornadas, su anfitrión, el rector Emilio Lora-Tamayo, ha destacado la necesidad de afrontar la recuperación con un modelo que combine salud y economía.

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