Montero, frente al Algarrobico, en febrero cuando prometió su derribo en cinco meses.

Montero, frente al Algarrobico, en febrero cuando prometió su derribo en cinco meses. EP Almería

Andalucía

El Gobierno reconoce que ha incumplido el derribo del Algarrobico y se escuda en que es “un expediente complejo”

El Ayuntamiento de Carboneras, donde se ubica la construcción, debate este viernes si revoca una licencia que podría desbloquear el asunto.

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El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, reconoció este jueves que el Gobierno no ha cumplido el compromiso adquirido por la vicepresidenta del Ejecutivo central, María Jesús Montero. La socialista prometió el pasado 10 de febrero que, "en cinco meses", derribarían el hotel ilegal El Algarrobico de Carboneras, en Almería. Sigue en pie.

Según señaló Fernández este jueves, al hilo de la polémica por el incumplimiento, el Gobierno central está "avanzando en el procedimiento de expropiación parcial y derribo del hotel ilegal del Algarrobico, el máximo exponente del urbanismo salvaje".

La realidad es que es cierto que el Ejecutivo ha iniciado cuestiones previas al derribo. Incipientes en el proceso administrativo, pero iniciadas. Eso, sin embargo, no es lo que prometió Montero, que habló de derribo en cinco meses.

Fernández se escudó en que "se trata de un expediente complejo" para incumplir la promesa. Porque, según el delegado del Gobierno, el derribo del Algarrobico "requiere de la máxima seriedad y rigor".

"Hasta el momento se están cumpliendo todos los plazos", añadió Fernández pese a que, de hecho, el hotel sigue en pie contra la promesa de Montero el 10 de febrero de este mismo año.

En el BOE

En todo caso, el Gobierno subraya que el Boletín Oficial del Estado (BOE) ya ha publicado "el acuerdo de necesidad de ocupación" que concierne a la promotora. Según prevén, desde el 2 de agosto se podría "intentar llegar a un mutuo acuerdo".

Fuentes del Gobierno andaluz han insistido durante meses que eso es un imposible. El derribo del Algarrobico lleva enquistado años y un expediente de expropiación, señalan, solo conseguirá que la promotora acuda a la Justicia a proteger sus intereses. Y eso eternizaría, señalan, la solución.

Sea como fuere y pese al incumplimiento, el Gobierno central señala que tiene "compromiso firme" con este proceso para "eliminar este desmán urbanístico" en referencia al hotel ilegal junto a un parque natural de Almería.

Fernández, además, cargó contra el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, a quien acusó de ser "un mero espectador, sin hacer absolutamente nada y sin mover un papel" desde el Gobierno andaluz.

Desde la Junta no lo ven así. De hecho, el propio Moreno acusó este jueves durante el Pleno en el Parlamento andaluz de usar la "maquinaria del Estado" y el BOE para hacer campaña en su carrera ante las próximas elecciones andaluzas.

"La señora Montero plantó un atril ante el Algarrobico y, sin tener ni una competencia sobre el asunto, prometió que iba a derribar el hotel", recordó Moreno, quien esgrimió una foto de la construcción hecha esta semana. Está intacto.

Moreno acusó a la líder del PSOE andaluz y vicepresidenta del Gobierno de "mentir", cuestión que, añadió, es "paradigma del Gobierno central". "Son una máquina de generar desafección en las instituciones, porque tienen que tapar toneladas de corrupción", indicó.

El asunto del hotel se debate en el Gobierno central, en el autonómico, pero también en el Ayuntamiento de Carboneras, donde se ubica la construcción declarada ilegal. De hecho, el Consistorio debate este viernes una revisión de la licencia de obras, otra vía para su derribo.

La cuestión colea desde hace dos décadas y, por el momento hay más de 60 sentencias cruzadas cuya única verdad es que el hotel es ilegal. Pero nada se sabe por ahora de cuándo se podrá derribar.

Porque la licencia de obras es clave y parte de la estrategia de la Junta. Si el Ayuntamiento la declara ilegal, se podría desbloquear el caso. O bien acabar el hotel -improbable- o derrumbarlo. Pero sin eso, el caso está en suspenso. Porque, como se ha visto, la vía de la expropiación que prometió Montero, tampoco llega.