Marcela Once, la artista argentina que crea obras con materiales reciclados.

Marcela Once, la artista argentina que crea obras con materiales reciclados. Esteban Palazuelos

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Marcela Once, la artista que crea obras con materiales 100% reciclados: "El arte me ha rescatado y unido con la vida"

A raíz de un problema de salud, la argentina tuvo que dejar atrás los productos de pintura convencionales y reinventarse a partir de su propia investigación.

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"A los cuatro años mi madre me inscribió en una academia de pintura que estaba al lado de mi casa y ahí empecé a enamorarme". Sin rodeos, clara, concisa y con una sonrisa y una calma que llenan de paz allá donde pasa, Marcela Once (Mendoza, Argentina, 1967) recibe a ENCLAVE ODS en su estudio de Colmenarejo, un municipio a las afueras de la capital madrileña, para contarnos su historia.

Se adentró en esta disciplina a través del talento de su primera maestra de dibujo, Adelina Tarditi, ahora ya fallecida. "Empecé en los talleres, luego fui creciendo, hice escultura, pintura... Fue ella quien me inscribió en la Escuela de Bellas Artes", explica. Y es que, pese a que han pasado cerca de 50 años de aquellas primeras veces, Once lo sigue recordando con mucho cariño: "Fue muy bonito".

Su infancia siempre fue con pincel en mano y desde ahí todos sus estudios estuvieron ligados a las artes plásticas. Se licenció en Bellas Artes por la Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza), donde, dice, aprendió valores como "el respeto que hay que tenerle a esta disciplina o el concepto de que uno está al servicio del arte". Razón por la que ella no se considera más que "un mero artificio o un vehículo de este".

Al terminar sus estudios, cruzó el charco y trasladó su residencia a Madrid. Ya en España, cuenta, tuvo "la suerte" de ser madre muy jovencita y poder compaginar su pasión con su labor. "Empecé a trabajar de freelance y estuve en una empresa que hacía digitalizaciones. Eran copias de obras de arte para museos", indica.

De ahí, continúa, pasó a pintar en casa, donde "tenía un cuartito muy pequeñito" que le permitía estar presente en la crianza de sus hijos. Y, una vez se independizaron, llegó por fin el momento en el que Once pudo dedicarse en cuerpo y alma a aquello que tanto le apasionaba: pintar.

Fuera de lo común

Hasta la fecha, la mendocina siempre había empleado materiales de lo más habituales en sus obras. Sin embargo, hubo un día en el que se dio cuenta de que "cuando salía del estudio estaba mejor". Empezó a padecer "asma crónica y alergias diversas sin encontrar la causa", así que "por salud" se vio en la necesidad de reestructurar todo lo que conocía hasta el momento sobre esta disciplina.

La artista sostenible Marcela Once recibe a ENLACE ODS en su estudio de Madrid.

La artista sostenible Marcela Once recibe a ENLACE ODS en su estudio de Madrid. Esteban Palazuelos

"Quité las cosas que creía que eran malas. Comencé a leer y me di cuenta de que casi todas las pinturas utilizaban metales pesados, muchísimos plásticos y partículas de químicos. Retiré todo eso y me frustré porque pensé que era el final", confiesa. Pero no fue así. Aquellos instantes se convirtieron simplemente en el inicio de la transformación; un cambio que hoy hace de Once una artista de lo más innovadora.

Se documentó hasta recordar aquello que estudió años atrás: las pinturas rupestres. Y es que anteriormente tan solo se empleaban materiales naturales. Así, la argentina se arrancó a investigar: "Hice cursos, por ejemplo, con una mujer africana que me dio muchos tips y consejos sobre cómo utilizar biomateriales como la cáscara de huevo".

La forma de tratar estos elementos para adaptarlos a la pintura es más sencilla de lo que pudiera parecer, pero es un paso imprescindible a la hora de evitar la aparición de hongos en un futuro. La clave está en mezclarla con un alga, que es un material que luego se endurece mucho. Más o menos similar es el tratamiento de las cáscaras de frutos secos o de la naranja, componentes que también se encuentran en el estudio de Once.

Arte natural

"Las muelo, las dejo secar o las meto en una fuente de calor extrema, como puede ser el horno y, cuando ya se ha secado, pero sin que queme, ya están libres de partículas que pueden producir hongos", continúa Once. Es ahí cuando llega el turno de mezclar el material en cuestión con las algas, para que espese y la artista pueda trabajarlo. "Así ya agrego lo que quiera, puedo poner arenas, incorporar pigmentos naturales, oxidar con vinagre...".

A esto, hemos de sumar otro tipo de materiales naturales que utiliza para conseguir diferentes pigmentos. Entre sus estanterías encontramos piedra volcánica, pigmento hindú, carbón, tierra, grafito o cristal reciclado. Pero la mendocina no se cierra a nada, y también ha incluido a su lista una masa de papel reciclado que hace ella misma, o arenas, entre sus componentes más recurridos.

La mendocina Marcela Once utiliza materiales 100% reciclados para sus obras.

La mendocina Marcela Once utiliza materiales 100% reciclados para sus obras. Esteban Palazuelos

Si bien es cierto que ahora Once es toda una experta en la cuestión, asegura que "cuando decides empezar este camino todo es complicado". Y lo explica: "No es lo mismo abrir un bote de un acrílico que ya viene preparado y pintar, que elaborar tus materiales. Lleva mucho más tiempo".

Así, donde otros se lanzan a pintar rápidamente, como bien dice la propia argentina, ella tiene que dedicar horas o incluso días a la obtención y preparación de los materiales. Por ejemplo, ahora, está trabajando con papel molido. "Tengo que reciclar papel por todos lados, molerlo y picarlo. Eso es laborioso", indica.

La argentina está empezando a utilizar una masa de papel reciclado para sus creaciones.

La argentina está empezando a utilizar una masa de papel reciclado para sus creaciones. Esteban Palazuelos

Aunque si algo le apasiona verdaderamente de este proceso, es el momento de incorporar nuevos materiales. Esa investigación, dice, es "muy bonita y divertida". Tanto, que asegura que "te atrapa".

Una entre un millón

Nada más entrar a su estudio de Colmenarejo, uno se da cuenta de que la vibra de allí es diferente. Once es única y está llena de vida, así como ocurre con sus piezas (en el sentido más literal de la palabra). Y es que, "cuando trabajas con obra orgánica, —indica— tienes que tener en cuenta que es algo vivo y va a permanecer así. Es lo bonito y lo interesante de esto".

Esto, explica, hace referencia a que sus cuadros "pueden sufrir ciertas modificaciones". Si bien es cierto que "no va a cambiar su aspecto a nivel de composición, ni tampoco a nivel estético, el color podría variar un poquito o podría caerse una piedrecita". Y precisamente esta particularidad es lo que ha hecho de su arte algo único.

Así, a través de un proceso más o menos laborioso, y un enfoque totalmente fuera de lo común, Once ha logrado involucrarse en proyectos de gran tamaño con el objetivo de dar a conocer su talento. "Hace muy poquito, hice un hotel, también he hecho oficinas y he vendido muchas obras para espacios muy grandes. Eso me encanta, así hay mucha gente que puede disfrutarlo, no solamente una persona", indica.

Sin embargo, la viveza no es la única particularidad de las piezas de la mendocina, y así lo señala: "La persona que compra mi cuadro debe saber, estar de acuerdo y le tiene que interesar el medioambiente". Porque para Once una de sus claves radica en relacionarse con el entorno a partir del "respeto y con la conciencia de que cada gesto, por pequeñito que sea, puede llegar a contribuir".

Marcela Once tuvo que dejar de pintar con aerosoles por salud.

Marcela Once tuvo que dejar de pintar con aerosoles "por salud". Esteban Palazuelos

En ese caso, dice la artista, aunque no quiere "ser presuntuosa", el simple hecho de no utilizar aerosoles en su estudio le da la tranquilidad de saber que está aportando este granito de arena, tanto para su propio bienestar como para el del planeta.

Concienciar en verde

Define esta disciplina como "una especie de salvación". "Es vida, conciencia, introspección y comunicación", menciona. Aunque, si lo tuviera que resumir brevemente, la argentina no duda: "El arte ha sido lo que me ha rescatado y lo que me ha unido a la vida".

Once fluye a través de sus propios sentimientos y emociones, y así lo representa en sus obras. "Hay gente que se inspira con la naturaleza, yo lo hago con las emociones", explica. "Depende de la etapa en la que esté y del momento".

Marcela Once pinta su nueva obra en vivo para ENCLAVE ODS.

Marcela Once pinta su nueva obra en vivo para ENCLAVE ODS. Esteban Palazuelos

"A lo mejor este momento me inspira para hacer algo, o la pregunta que me hiciste, o las reflexiones y los pensamientos que tengo", confiesa. Aunque, por ahora, su prioridad es jugar con materiales que le dan "la oportunidad de contar un poquito sobre la impermanencia, porque esto no se repite, estamos en un momento donde nada es certero y expresarlo con materia es maravilloso".

Hay quienes han abierto conciencias a través de esta disciplina, sin embargo, a Once no le gustaría ser un referente (o por lo menos no lo tiene claro de momento). Eso sí, cree que en un punto su trabajo será tan eventual "como para crear un pequeño mensaje de que se puede pintar con cosas naturales, que uno puede cuidar la salud y que podemos dejar los aerosoles a un lado porque no son buenos para ninguno de nosotros".

Marcela Once, la artista sostenible que crea obras con materiales 100% reciclados.

Marcela Once, la artista sostenible que crea obras con materiales 100% reciclados. Esteban Palazuelos

Así, cuando le preguntamos por su futuro, Once responde con la misma llaneza y bondad con la que nos recibió minutos atrás en las escaleras que daban a su estudio: "Quiero seguir creciendo en todos los aspectos. Como artista me gustaría evolucionar de forma humilde. No quiero grandes cosas, simplemente seguir trabajando, que eso ya me parece bonito".