Si echamos un vistazo a las redes sociales, el clima es fácil de palpar: hay frustración, hartazgo, desconfianza y escepticismo en general.

De repente, todo es too much: demasiado contenido, demasiado poco tiempo, demasiado postureo, demasiado uso de la inteligencia artificial, demasiadas colaboraciones con marcas… Esta sobrecarga ha convertido lo que antes era una fuente ilimitada de entretenimiento en un proveedor de desgaste emocional y psicológico.

Esta es la reflexión de la que parte el informe The (Social Media) Times, They Are A-Changin de Good Rebels. Un análisis de lo que está pasando en redes sociales y de cómo las marcas pueden volver a conectar con un usuario que ha perdido la fe en el contenido digital, especialmente cuando lo sienten como publicidad.

Las conclusiones generales del informe nos cuentan que el contexto sociocultural afecta tanto a las decisiones que tomamos a nivel económico como a la atención y el tiempo que invertimos al consumir contenido: las marcas deben hacernos sentir, transmitir valores genuinos y tener la capacidad de generar vínculos verdaderamente significativos para llegar a conectar.

En medio de este hartazgo generalizado, el usuario está buscando nuevos refugios digitales: espacios de privacidad digital (como Reddit, Substack o Discord) con un enfoque muy segmentado y curado, donde el contenido se siente genuino y pertinente frente al ruido de las plataformas tradicionales.

A esto se une una fatiga ante lo sintético, un cansancio frente a contenidos producidos con IA o generados de forma automática. Lo imperfecto, humano, artesano y realmente trabajado cobra un nuevo significado hasta llegar a ser un verdadero factor diferencial.

Asimismo, el informe analiza el papel que ocupan los influencers en el nuevo Marketing Mix; un rol que se había atribuido, hasta el momento, a los medios de comunicación tradicionales. Ahora, el macroinfluencer no es un creador de contenido venido a más, sino un medio de comunicación con la planificación, presupuestación y medición que eso implica.

En conclusión, el informe nos habla de un 2026 que no será el año de las plataformas, ni de las métricas, ni de los algoritmos: será el año del human generated content, de las personas.

En un ecosistema saturado de contenido sintético, incertidumbre socioeconómica, fatiga digital y conversación fragmentada, lo que determina el éxito de una marca en redes sociales es la intención. La autenticidad. La verdad que se es capaz de mostrar.

Es el momento de ser valientes. De dejar de lado lo que ha funcionado siempre. Porque si algo hemos aprendido analizando estas tendencias, es que lo que viene no es un colapso, sino una oportunidad para que las marcas vuelvan a importar. Para que el contenido vuelva a tener alma y para que la creatividad vuelva a ser, por fin, una declaración de intenciones.

The (Social Media) Times, They Are A-Changin.

Y no tiene pinta de que vayan a parar de hacerlo.

*** Bárbara M. Ramírez es Head of Social Creative de Good Rebels.