La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), Teresa Ribera, presentó el pasado viernes 23 de julio los avances en la ejecución del marco de actuaciones prioritarias para recuperar el Mar Menor, un plan que cuenta con un presupuesto de 484 millones de euros de los que ya se han invertido 61 millones. 

“El conjunto de actuaciones que conforman este marco va a contribuir sustancialmente a la recuperación de este valiosísimo ecosistema. Necesitamos sumar esfuerzos y, como siempre, le tendemos la mano al Gobierno Regional para que contribuya y complemente este ambicioso proyecto”, señaló la vicepresidenta. 

Sin embargo, según lamentó en una entrevista a EL ESPAÑOL Antonio Luengo (PP), consejero de Agua, Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Región de Murcia, existe una “falta de comunicación” de todas las medidas puestas en marcha en el Mar Menor. 

[Antonio Luengo (Murcia): "Los agricultores y ganaderos están ayudando a recuperar el Mar Menor"]

De la misma manera se pronunció la Comisión Europea en su informe sobre el estado de la mayor laguna salada de Europa a principios de julio: “La complejidad de la situación ambiental de la laguna confirmó que todos los actores debían actuar de manera coordinada e inmediata, para evitar un mayor deterioro del ecosistema y futuros episodios de eutrofización y anoxia”, señaló. 

Las medidas anunciadas

Entre otras medidas, Ribera anunció el establecimiento de un cinturón verde mediante la creación de un humedal seminatural en la desembocadura de la rambla del Abujón, un proyecto con un presupuesto que asciende a 6,27 millones de euros y que está previsto que se inicie en febrero de 2023. 

Otra medida anunciada por la vicepresidenta fue el diseño del Proyecto de restauración de emplazamientos mineros peligrosos abandonados y la restauración de zonas afectadas por la minería en la zona de influencia del Mar Menor, cuya superficie de intervención estaría en torno a las 200 hectáreas.

Asimismo, Ribera puso el foco en la importante labor en materia de vigilancia e inspección realizada por la Confederación Hidrográfica del Segura, que según señalan desde el Gobierno, ha logrado importantes avances en la mayor laguna salada de Europa. 

Entre otros, destaca la desconexión y el cese de suministro en 5.526 hectáreas de regadío ilegal, 3.699 de ellas desconectadas voluntariamente. “Las medidas de ordenación y vigilancia del dominio público hidráulico son la piedra angular de este Marco de actuaciones”, enfatizó la vicepresidenta.

Una situación límite

El Mar Menor se encuentra en una situación límite. Según señaló Luengo, esto se debe a dos principales factores que están apagando su luz: el exceso de agua y el aumento de las temperaturas debido al cambio climático. 

Todo ello genera contaminación en las aguas y también la proliferación de algas, que tiene como consecuencia los episodios frecuentes de anoxia o falta de oxígeno, lo que provoca una muerte masiva en la vida marina. 

[La pesadilla del Mar Menor persiste: la laguna ha perdido su capacidad de autorregulación]

La retirada de estas algas, conocidas como cabello de ángel —chaetomorpha linum— , están suponiendo un fuerte desembolso económico para las arcas públicas. Solo durante los cinco primeros meses de 2022, el gobierno de Murcia llevaba invertidos 3 millones de euros en la retirada de 4.000 toneladas de algas.

Otra de las problemáticas a las que se enfrenta el Mar Menor tiene que ver con la acción humana. Según estimaciones de la ONG Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), la contaminación debido a los vertidos agrícolas por nitratos y fosfatos ha provocado la “recogida de más de 8.000 kg de peces y crustáceos muertos en las orillas del Mar Menor”. 

Por ello, organizaciones como WWF y ANSE señalan la importancia de que se sancione, elimine y restaure las más de 8.500 hectáreas de cultivos de regadío intensivo e ilegal del Campo de Cartagena.

Por el momento, el gobierno regional de Murcia ha puesto en marcha la figura del operador agroambiental, cuyo cometido será hacer cumplir a los agricultores del Campo de Cartagena la Ley de Protección y Recuperación del Mar Menor.