La cocina manchega evolucionada con toque creativo y vanguardista y los platos elaborados a base de carne de caza del chef José Antonio Medina, propietario del restaurante El Coto de Quevedo, brillan desde este martes tras lograr su primera estrella en la Guía Michelin.

Medina, que regenta este restaurante ubicado en el término municipal de Torre de Juan Abad (Ciudad Real), en plena tierra de El Quijote, ha asegurado este miércoles a Efe, que esta estrella Michelin reconoce la cocina "austera y de pobres" que se ha cocinado en La Mancha desde la mitad del siglo pasado.

"Esa cocina de nuestras madres, de mi madre, la hemos convertido en El Coto de Quevedo en un menú sincero y humilde, en el que los escabeches y los guisos de caza tienen un protagonismo especial y, a los que nosotros, hemos acabado poniendo de forma bonita encima de un plato", ha dicho.

Eso es lo que, en su opinión, ha valorado el jurado de la Guía Michelin, que ha podido degustar una cocina muy asentada en la tradición castellanomanchega, pero que a la vez se presenta muy evolucionada.

En su restaurante, ha dicho Medina, ofrecen pequeños bocados de esa cocina manchega que visualmente resultan muy bonitos, pero que en el paladar recuerdan a platos como el pisto, las migas o a la carne de caza que son seña de identidad de esta tierra.

José Antonio Medina no oculta que este prestigioso galardón para todo el equipo de trabajo le ha supuesto una enorme alegría, y aunque reconoce que cualquier cocinero profesional sueña con conseguir algo así, en El Coto de Quevedo nunca había sido un objetivo buscar lograr una estrella Michelin.

"Siempre hemos estado haciendo las cosas bien, nos gusta hacer la cocina que hacemos y al final, sin darnos cuenta, lo hemos conseguido".

La base de este reconocimiento considera que puede estar en su menú degustación 'Raíces', una propuesta gastronómica que le identifica con sus raíces, que están en las recetas de su madre, que hace 40 años se metió detrás de la cocina de una pensión para dar de comer en su pueblo y que ayer era "la mujer más orgullosa del mundo".

Unas raíces que, ha dicho, se condensan en un estilo reflexivo y una impecable técnica en platos, reflejados en la ensalada de perdiz en escabeche, el cordero lechal con salsa de ostras, gel de ajo negro y trompetas de la muerte o el ciervo asado con lombarda encurtida.

José Antonio Medina, que asegura que no tiene previsto subir los precios de la carta a raíz de obtener este galardón, se ha mostrado orgulloso por contar con un equipo de trabajo "muy manchego" que le ha acompañado a lo largo de todo su recorrido profesional.

"Todos somos de la provincia de Ciudad Real, y la gran mayoría de la comarca del Campo de Montiel, y para mí, es una gran satisfacción poder compartir con ellos esta estrella Michelín", ha añadido.

El tesón y la dedicación de su equipo, cualidades por la que también se reconoce a la gente de La Mancha, han sido clave para lograr este reconocimiento.

Y a partir de ahora, se han propuesto "no abandonar el camino de hacer las cosas bien", mejorando algunas propuestas culinarias y fijándose nuevos retos, que trabajarán "a base de pico y pala" para seguir labrándose un futuro en la cocina de este país.