Nueva operación en Castilla-La Mancha relacionada con el cultivo y elaboración de drogas y fraude en el consumo de energía eléctrica. Es casi el pan de cada día de la página de sucesos en la región, ya que este tipo de operaciones de la Guardia Civil y la Policía Nacional se dan con mucha frecuencia y son habituales los desmantelamientos de plantaciones y laboratorios, con las consiguientes detenciones de los presuntos delincuentes. En este caso se trata de una intervención de la Benemérita en la provincia de Albacete, con cuatro detenidos y dos centros de producción de cannabis desmantelados.

Según ha informado la Dirección General de la Guardia Civil en un comunicado, efectivos del equipo de investigación de la localidad albaceteña de Tobarra han detenido, en el marco de la operación Tosam, a cuatro vecinos de Albatana de 37, 39, 58 y 75 años de edad, como presuntos autores de un delito contra la salud pública, en la modalidad de cultivo o elaboración de drogas, además de otro de defraudación de fluido eléctrico.

Esta actuación se enmarca dentro de las actividades que la Guardia Civil desarrolla en la provincia, con el objeto de erradicar el cultivo, elaboración y distribución de sustancias estupefacientes, en este caso de cannabis sátiva. Las investigaciones comenzaron el pasado mes de marzo, cuando los agentes del Cuerpo tuvieron conocimiento de la presumible existencia de distintos centros de producción y germinación de marihuana, de los conocidos como indoor, ubicados en varias viviendas de Albatana.

Dos viviendas

Con estas primeras informaciones, la Benemérita puso en el centro de las pesquisas a cuatro personas, todas ellas vecinas de Albatana, las cuales podrían estar detrás de estos puntos de cultivo indoor, consiguiendo localizar las dos viviendas, donde se ubicarían las plantaciones y a las que estas personas realizaban frecuentes visitas, según la información oficial.

Con todas las pruebas recabadas, la Guardia Civil realizó sendos registros en las viviendas objeto de la investigación, interviniéndose, en la primera vivienda, 175 plantas de cannabis sativa en su última fase de floración, que arrojaron un peso de 22 kilos.

Otro imagen de la operación

Mientras, en la segunda vivienda se intervinieron 302 plantas de cannabis sativa, en su última fase de floración, que arrojaron un peso de 32 kilos, así como numerosas lámparas, ventiladores o aparatos de aire acondicionado. Además, fueron intervenidos diferentes útiles y elementos utilizados en el cultivo de la sustancia vegetal, básicamente utensilios de fontanería, alumbrado o refrigeración.

Según pudo comprobar la Guardia Civil durante los registros, las dos viviendas contaban con sistemas de riego, ventilación, refrigeración e iluminación, además de controles de temperatura y humedad permanentes, que aceleraban el crecimiento de las plantas de cannabis sativa, aumentando así su producción y rendimiento. Con los cogollos, y la parte útil de las plantas intervenidas, se podrían haber elaborado 23.800 dosis, después de sufrir los procesos necesarios.

Consumo de energía

El desmantelamiento de estas plantaciones permitió verificar que los autores, para el funcionamiento de las instalaciones, necesitaban un elevado consumo de energía eléctrica, motivo por el que habían practicado un "enganche" ilegal a la acometida general de la red eléctrica. Así maximizaban los beneficios y conseguían minimizar los costes de producción en el cultivo de marihuana.

En la operación Tosam han participado efectivos de la Guardia Civil, tanto del Equipo de Investigación de la Guardia Civil de Tobarra como de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) y diferentes patrullas de Seguridad Ciudadana de varias unidades del Cuerpo de la comarca hellinense.

Las diligencias instruidas por efectivos del Equipo de Investigación de la Benemérita tobarreña y las personas detenidas por los ilícitos penales investigados fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción número tres de Hellín, que ha entendido de los hechos.