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Sacrifican 110.000 gallinas por un foco de gripe aviar en una explotación de Yeles (Toledo)
El positivo ha sido confirmado este mismo miércoles por el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid).
Más información: Más de 37.000 gallinas sacrificadas en un pueblo de Guadalajara tras detectarse un foco de gripe aviar
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha notificado la detección de un foco de gripe aviar en una explotación de Yeles (Toledo) que ha obligado al sacrificio y destrucción de las 110.000 gallinas ponedoras que componen el censo de la explotación.
Según ha informado el Gobierno de Castilla-La Mancha, esta decisión se ha tomado después de que el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid) haya confirmado este mediodía la existencia del virus en esta explotación.
A partir de este momento se ha puesto en marcha el protocolo de actuación correspondiente, en coordinación con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, la Consejería de Sanidad y con el mismo sector, "con el objeto de minimizar el riesgo de diseminación de la enfermedad y proteger la sanidad animal y la seguridad de las explotaciones de la zona".
Estas mismas fuentes destacan que esta explotación ya se encontraba dentro de la zona de restricción de un foco declarado días atrás en Madrid.
La aplicación de todas las medidas protocolarias conlleva el sacrificio de los animales, así como la eliminación de materiales presentes que pudieran vehicular el virus como estiércol, pienso, o camas, entre otros elementos.
"Asimismo, se procederá también a la realización de las encuestas epidemiológicas correspondientes para conocer, tanto el posible origen del foco, como la identificación de las explotaciones que pudieran estar en riesgo por movimientos de personas, vehículos, animales o materiales", añaden.
Restricciones
Por lo que respecta a la zona de restricción establecida, compuesta por una zona de protección y otra de vigilancia de tres y diez kilómetros respectivamente, es fundamental reforzar la vigilancia y medidas de bioseguridad. En estas explotaciones también se encuentran restringidos los movimientos de aves y demás productos avícolas.
Además, está previsto que desde la Dirección General de Ordenación Agropecuaria se mantengan los contactos pertinentes con el sector para informarle del estado de la situación, de las actuaciones que se han realizado y se realizarán en los próximos días y para pedir la máxima colaboración y precaución en las medidas de prevención y control.
Por último, y aunque esta situación no supone un riesgo de salud pública para la población general, las consejerías de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural y la de Sanidad están trabajando coordinadamente. El riesgo para los trabajadores con exposición ocupacional en la explotación afectada con aves enfermas se considera bajo y no existe riesgo asociado a consumo de carne de ave o huevos cocinados.
También recuerdan la necesidad de extremar las medidas de bioseguridad en las explotaciones avícolas en la península, así como de comunicar cualquier sospecha de enfermedad en animales a los Servicios Veterinarios Oficiales de la Comunidad Autónoma correspondiente, con objeto de garantizar la posible detección precoz de cualquier nuevo foco y permitir adoptar las medidas necesarias para evitar la diseminación de la enfermedad a otras explotaciones.
Se trata del segundo foco de este tipo detectado en Castilla-La Mancha en los últimos meses tras el conocido en una explotación de gallinas de recría para carne en Pozo de Guadalajara a primeros de septiembre. En aquella ocasión, el sacrificio afectó a 37.300 animales.