El Ayuntamiento de Santa Olalla (Toledo) celebró el pasado jueves 25 de junio su primer pleno tras la declaración del el estado de alarma, por lo que, a petición del alcalde, Pedro Congosto, la Corporación municipal y todos los asistentes guardaron un minuto de silencio en memoria de las víctimas de la pandemia.

Entre los puntos del orden del día estaba la aprobación del presupuesto para 2020, que ya contempla la reducción de la partida de fiestas y el trasvase de estos fondos a otras partidas creadas para paliar la influencia del COVID-19, evitar posibles rebrotes y hacer frente al "varapalo económico" que está suponiendo esta situación.

El alcalde cedió la palabra a varios de sus concejales, que fueron desgranando las medidas que hasta la fecha se han ido tomando en las distintas materias, destacándose las ejecutadas en el área de Bienestar Social, donde la concejala Eva Rodríguez comunicó al pleno un considerable incremento en las familias beneficiarias del banco de alimentos.

El concejal de Cultura y Nuevas Tecnologías, Josué López, resumió brevemente algunas iniciativas virtuales llevadas a cabo durante el confinamiento con el objetivo de animar y entretener a los vecinos y la concejala de Educación, Sara Díaz, comunicó también que se está colaborando junto a la dirección del colegio en algunas medidas a tomar en el arranque de curso en septiembre.

Finalmente, el alcaldePedro Congosto desgranó las medidas económicas que se han tomado y escuchó las propuestas de la oposición a este respecto, como ya se había hecho anteriormente en reuniones previas entre ambos grupos políticos.