El municipio guadalajareño de Humanes está viviendo una situación límite ante la alta okupación de viviendas. Por ello, los vecinos y la propia alcaldesa, Elena Cañeque, han denunciado lo que está ocurriendo en una urbanización de lujo de la ciudad, en el barrio de la Estación, con 43 viviendas okupadas de las 45 totales.

En este sentido, el pasado martes, 23 de agosto, alrededor de unos cien vecinos decidieron manifestarse contra esta situación a las puertas de la urbanización. Mientras tanto, tal y como han mostrado en el programa ‘Cuatro al día’ de Mediaset, los okupas se encontraban bañándose en la piscina del complejo, que ya se encuentra en un estado deplorable.

Una de las vecinas explicó al reportero del programa algunas de las situaciones que están viviendo. “Se dedican a tirar cosas por la ventana, como lavadoras o sillas. Yo me levanté un día con el coche rayado. Hay muchos problemas y hay gritos. Es así todas las noches. No podemos dormir y sufrimos incertidumbre cuando nos vamos a trabajar y dejamos la casa sola”.

Asimismo, otro vecino expresó su preocupación con un testimonio de alguna situación de “jaleo” de madrugada en la que se escucharon frases como “te voy a matar”. “Son problemáticos”, afirma.

Protesta frente a la urbanización okupada. Foto: CMM.

Intranquilidad

“Hay miedo”, ha confesado, por su parte, la alcaldesa, Elena Cañeque, a EL ESPAÑOL – EL DIGITAL CLM. “Humanes es un pueblo tranquilo en el que nos conocemos todos. Este barrio es un barrio pequeño en el que viven unas 150 familias. Que ahora lleguen estos okupas hace que la gente esté intranquila”.

Sin embargo, por el momento “no hay ninguna denuncia de vecinos” por robos u otros problemas, pero sí que tienen constancia de altercados y peleas entre los propios okupas.

Así, la primera edil ha aclarado que llegaron hace dos o tres meses. “Es cierto que en el municipio ya había alguna vivienda okupada desde hacía años, pero eran familias que no habían dado problemas. No tenemos datos de cuántos son”.

En cuanto a su forma de vida, desconocen ciertos detalles como si están enganchados de manera ilegal al agua y a la luz. “No sabemos cómo viven. Desde el Ayuntamiento informamos a la compañía eléctrica de la sospecha de que estas viviendas estaban okupadas porque entendemos que no tendrán contratos con las compañías”.

Por último, ha reconocido que desde el Consistorio no pueden aportar una solución. “Los Ayuntamientos podemos hacer poco. Hemos avisado a la Guardia Civil, a Bienestar Social por si hubiese menores, a las compañías eléctricas o a las inmobiliarias”.