
Emiliano García-Page ha sido entrevistado este martes por Ana Rosa Quintana en Telecinco.
Page avisa a Sánchez sobre las "cesiones muy graves" de la inmigración a un partido "xenófobo" como Junts
El presidente de Castilla-La Mancha da la voz de alarma sobre la negociación del Gobierno con el partido de Carles Puigdemont.
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"La inmigración es una concesión doblemente grave porque es una competencia clarísima del Estado". Así de rotundo ha sido el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en una entrevista este martes con Ana Rosa Quintana en Telecinco, donde ha denunciado que la negociación del Gobierno de Pedro Sánchez con Junts, el partido de Carles Puigdemont, "es parte de un eslabón de cesiones muy graves".
Page ha calificado a Junts como un partido "cuasi xenófobo" y de "extrema derecha" y ha alertado a Sánchez de que la cesión de la inmigración a Cataluña que se está negociando y parece inminente sería un paso "muy grave" y "reaccionario", más aún tratándose de una negociación con un partido con posiciones ideológicas contrarias a las del PSOE, como, por ejemplo, "el rechazo al otro" que practica Junts.
"A mí me encantaría que el muro que algunos han exhibido contra la ultraderecha, también se hiciera contra el partido más de extrema derecha que tenemos, además de Vox, que es Junts", ha dicho el presidente castellano-manchego.
"Mucho cuidado"
"No se puede negociar lo que uno es, hay que negociar pero no a costa de dejar de ser lo que somos", ha opinado García-Page, quien ha recordado que la inmigración "es una competencia exclusiva del Estado" y que una comunidad autónoma no puede asumir competencias estatales".
En un mensaje directo a Sánchez, Page ha dicho que "no puedes dejar de ser un partido socialdemócrata, constitucionalista, con límites y con perímetro. Hay cosas especialmente graves y en particular el tema de inmigración es doblemente grave porque es una competencia exclusiva del Estado".
A juicio del líder de los socialistas de Castilla-La Mancha, "hay que tener mucho cuidado porque todos hemos jurado acatar y hacer acatar la Constitución", recordando que las comunidades autónomas existen "porque existe España, que es un único país, una sola nación, aunque con una enorme pluralidad".
Page ha dicho, en este sentido, que España no puede permitir que existan 17 países diferentes en su seno y que eso es "una lógica irracional" y una "barbaridad". Ha puesto como ejemplo el debate de la financiación autonómica, rechazando que la riqueza sea de las regiones y no del conjunto de España.
"Si Madrid pide lo que está pidiendo Cataluña, que a día de hoy es la primera en renta y en riqueza acumulada, qué habría dicho todo el Gobierno en pleno. Estamos ante la inversión de los términos. Hay medidas que se están tomando por imposición de Puigdemont y la última es claramente reaccionaria", ha dicho García-Page con rotundidad.
La soberanía de todos
"Eso es inventarse otro país, la riqueza es del conjunto" y lo contrario, a juicio del presidente de Castilla-La Mancha, "no tiene sentido ninguno ni es posible técnica ni económicamente". "Esto es entrar en la lógica absolutamente irracional de quien lo que considera es que la soberanía, en vez de ser de todos los españoles, lo es por partes", ha criticado Page.
Estas declaraciones del líder autonómico se producen en medio de la negociación del Gobierno de Sánchez con Junts para la cesión de las competencias de inmigración y extranjería a Cataluña, un acuerdo que podría ser inminente y que ha generado una gran polvareda política y el rechazo de la Policía Nacional.
Como se sabe, a cambio de seguir dando su apoyo a Pedro Sánchez, Junts ha exigido que se entregue a los Mossos "plenas competencias en inmigración", y a la Generalitat, la capacidad de conceder los NIE (número de identificación de los extranjeros que residen en España, equivalente al DNI).
Esto supondría que la Policía autonómica asumiría en Cataluña todas las competencias que hoy tiene la Policía Nacional para el control de entrada y salida de extranjeros en fronteras, puertos y aeropuertos, la investigación de las redes de inmigración ilegal y el régimen sobre "extranjería, asilo e inmigración".
En todo el país, estas competencias están en manos de la Policía Nacional y la Guardia Civil. Pero el cuerpo más afectado por la exigencia de los separatistas será el de la Policía.
"Es reaccionario"
En opinión de Page, negociar este tipo de cuestiones con Puigdemont, incluida también la posibilidad de una financiación singular para Cataluña, es "reaccionario" y "nada de izquierdas". Sánchez toma estas decisiones, según el presidente de Castilla-La Mancha, "por imposición" de Junts, un partido que plantea medidas "claramente reaccionarias".
"Ahora consideramos que hablar con Puigdemont, si lo hace Sánchez, es de izquierdas. Pero no todo lo que hace un dirigente de izquierdas es de izquierdas. A veces es reaccionario", ha insistido el líder autonómico, recordando que el PSOE es un "partido socialdemócrata con límites".
En este sentido, el líder castellano-manchego ha denunciado que algunos se planteen "colocar fronteras" interiores dentro de España, algo que, a su juicio, sería ir en la dirección "contraria" a la de la Unión Europea, donde se intenta una "convergencia" en materia de fronteras y con una misma moneda.
"Esto es consecuencia de que la mayoría de los partidos políticos, los más grandes, los más responsables en España, el mío desde luego y a veces le pasa al PP también, están haciendo todo lo contrario de lo que se presupone que tenían que hacer", ha explicado Page, lamentando que desde la política nacional se está empezando a "conceptuar el lado contrario, y es que España no es un país que permite la descentralización del poder a sus territorios, sino que son 17 países distintos".
Finalmente, Page ha planteado la posibilidad de que los presupuestos se pudieran pactar con un escenario a cuatro años, del mismo modo que en el Parlamento Europeo se negocian horizontes presupuestarios a cinco años, pues ha calificado de "infartante" tener que negociar el presupuesto anualmente y ha lamentado: "En España, nos jugamos la carta año a año".