Los 50 habitantes, y sobre todo los veraneantes de la preciosa localidad de Laguna del Marquesado en Cuenca, han sido los primeros de España en llevar a la práctica la iniciativa promovida por la empresa El Pozo Alimentación de colocar una calle de mis abuelos como homenaje a la importante labor que esta figura desarrolla en la sociedad. Posteriormente le seguirán la más de una decena de municipios que han decidido colocar el nombre de una calle a los abuelos a raíz de la iniciativa desarrollada por El Pozo Alimentación de honrar esta figura en nuestro país.

En concreto, la compañía desarrolló una emotiva campaña online en la que han participa 2.068 personas quienes con sus votos han elegido el municipio de España donde les gustaría que hubiera una calle dedicada a los abuelos. La iniciativa se difundió a través de un audiovisual, que ha sido visto por más de medio millón de personas, en el que se refleja el importante rol que juegan los abuelos dentro de la familia y el apoyo y cariño incondicional que demuestran a diario, especialmente en la educación y el cuidado de los nietos. Por todo lo que hacen y han hecho por nosotros, concluye la pieza, los abuelos se merecen una calle.

La calle de mis abuelos verá la luz este jueves, 23 de agosto a las 11.30 horas, en un emotivo acto que reunirá a los 300 vecinos de la localidad y que servirá para rendir homenaje a todos los mayores de España. Para tan destacada fecha, el Ayuntamiento, con su alcalde, José Rodrigo, a la cabeza, así como un representante de El Pozo Alimentación han preparado un emotivo acto público con palabras de afecto para nuestros abuelos y, con degustación de productos de la marca. Este evento será el pistoletazo de salida de las fiestas patronales que se celebran en honor de San Bartolomé.

El Pozo Alimentación quiere agradecer el gran afecto y recibimiento que el pueblo de Laguna del Marquesado ha tenido con esta iniciativa al demostrar, desde un primer momento, su compromiso con las personas mayores. Laguna del Marquesado es una antigua población ubicada en la serranía oriental de Cuenca, de gran belleza. Su nombre alude a la laguna de agua dulce que hay sobre los montes que dominan la población. El casco urbano se estructura en torno a un cerro, llamado de las Cabras. El conjunto tiene una calidad ambiental muy estimable. Cuenta con una población de 50 habitantes, número que se multiplica en verano, cuando personas con vinculación emocional con la localidad regresan a pasar sus días de descanso.