Una gran noticia. El Pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha ha aprobado este jueves por unanimidad el Proyecto de Ley sobre microempresas cooperativas y cooperativas rurales de Castilla-La Mancha y el Proyecto de Ley de estímulo económico de Zonas Prioritarias de Castilla-La Mancha, y ese consenso se ha producido gracias a los votos favorables del PP en el Parlamento regional. Es evidente a estas alturas que el Partido Popular está dando un giro en su estrategia política, centrada en aportar soluciones para Castilla-La Mancha ante cierto descontrol que a veces propicia el Gobierno regional en diferentes áreas, ya sean sanidad, educación o agricultura.

En cualquier caso, es bueno para la región observar el nuevo talante que el PP está asumiendo en este periodo de sesiones, tal como se ve reflejado entre diputados de distintos grupos políticos que observan cómo los populares castellano-manchegos desde la oposición están tomando una buena iniciativa política regional. Una iniciativa visible en todas las capitales y ciudades de la región sin temor a que se les recuerde el mantra creado por el PSOE de los “recortes”: a este hecho el PP de Castilla-La Mancha se está enfrentando sin ningún temor ni complejo ya que, tal como afirman los propios populares, la situación que se encontraron en la anterior legislatura nada tiene que ver con la actual y aún así se consiguió saldar la deuda socialista y sin cerrar ningún hospital.

Además de este talante, liderado en el día a día por Vicente Tirado, es lícito reconocer también en esta nueva estrategia política del PP regional la oportunidad del plan con 50 medidas en positivo presentado recientemente con gran repercusión y, en algunos casos, cierta preocupación entre miembros y altos cargos del Gobierno regional por si les estaban tomando la delantera.

Ahora bien, este talante de Vicente Tirado es también posible gracias al buen entendimiento que mantiene con el presidente socialista de las Cortes de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Vaquero, un hombre igualmente de gran experiencia y voluntad de consenso con el que los populares se entienden significativamente bien, pese a ciertos roces producidos. Todo el mundo sabe que sin Tirado y sin Vaquero en las Cortes la situación política actual no sería la misma.

Por ello, si se nos permite una sugerencia, conviene que el nuevo secretario de organización del PSOE, Sergio Gutiérrez, baje de la luna europea y pise el suelo castellano-manchego para al menos pasar un par de tardes con Vaquero a modo de master class.