Confidencial

El polémico juez ciudadrealeño echa un chorreo a los católicos por acomplejados

12 abril, 2019 00:00

La revista Misión ha entrevistado al juez ciudadrealeño Emilio Calatayud en los juzgados granadinos en los que trabaja desde hace años. El entrevistador advierte en las palabras del magistrado que aún conserva el acento manchego en medio de tantos andaluces como los que trata a diario. Calatayud hace honor a su fama de hombre que no calla lo que piensa, centrándose en esta ocasión en su pensamiento como católico practicante y en la defensa, sin complejos, de los principios y valores de la Iglesia. También aquí va contracorriente de lo políticamente correcto y de algunas de las ideas-fuerza que prevalecen en la sociedad actual, incluso entre los católicos.

Famoso por sus sentencias ejemplares a los jóvenes que delinquen, generalmente llenas de sentido común, Calatayud habla claro en esta entrevista sobre un aspecto importante de los católicos: su miedo a decir que lo son.

"¡Claro! A mí me han llamado facha, carca… Pero me da igual. Es como lo de católico. Ha habido un tiempo en que a la gente le daba miedo decir públicamente que es católica", afirma sin contemplaciones. El entrevistador puntualiza: "Habla en pasado". Y responde: "Sí, porque la gente se ha cansado de tener que ocultar que es católica".

- Usted, desde luego, no lo hace.

- Yo lo digo siempre. Y me cabreo con la Iglesia, porque creo que es hora de dar un puñetazo en la mesa con el tema del laicismo. Ante el ataque que hay contra los católicos, yo cerraría tres meses todos los servicios que sostiene la Iglesia. ¿Que los católicos somos todos corruptores de menores y no podemos decir lo que pensamos? Pues ale, que todos los pobres que atiende Cáritas, San Juan de Dios, las monjas de tal y cual, vayan a los Ayuntamientos o a las Comunidades Autónomas. ¿La Semana Santa? ¡A pasear al santo dentro de la iglesia! ¡Verás qué alegría para el turismo, los bares y los hoteles!  Ve a San Juan de Dios, en Granada, a ver quién atiende a los pobres. ¿Y en Valencia, dónde está la gente que llegó en el barco aquel? En Cáritas. Los católicos tenemos que decir que la Iglesia es muy buena, con hijoputas como en todos los gremios, pero que ya está bien de tomarnos el pelo.

Se puede decir más alto, pero no más claro. En este tono discurre la larga entrevista de Misión. No tiene desperdicio y puedes leerla íntegra PINCHANDO AQUÍ.