Confidencial

Convulsa reunión del PSOE en el Congreso: Barreda no se calla

12 diciembre, 2018 00:00

Tal como viene siendo habitual en él estos últimos años, y con la libertad que dan la edad, la experiencia y el no tener necesidad perentoria de optar a cargos públicos en el futuro, el expresidente de Castilla-La Mancha José María Barreda suele decir lo que piensa y lo defiende allá donde sea menester. Incluso dentro de su propio partido y aunque sus posiciones vayan en contra de las que mantiene la dirección nacional. Es evidente que Pedro Sánchez no es santo de la devoción de Barreda, pero tampoco lo es de otros muchos que se callan. La bronca vivida ayer por el Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados viene a confirmar que al expresidente castellano-manchego hay cosas en su partido que no le gustan nada y piensa que se están haciendo mal. Pero lo que más parece molestarle es que no haya autocrítica y no se reconozcan los errores por parte de la dirección.

Tal como informaba Europa Press, la debacle del PSOE en las elecciones andaluzas del 2 de diciembre y la inesperada irrupción de Vox con 12 diputados por vez primera en un Parlamento en España ha forzado un debate en el seno del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados que la dirección del partido pretendió, sin éxito, esquivar.

Entre varios de los asistentes a la reunión de este martes hubo cierto asombro al comprobar que, en la primera cita que los diputados socialistas celebraban tras el 2-D, la dirección del grupo daba por finalizado el encuentro tras hablar en apenas un cuarto de hora del orden del día del Pleno de esta semana y algunos detalles superficiales sobre la próxima cena interna de Navidad y sin hacer una sola mención a las elecciones andaluzas.

En ese momento la diputada vallisoletana Soraya Rodríguez, seguida del expresidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, pidieron la palabra para evitar que la reunión terminase sin más. La que fuera portavoz en tiempos de Alfredo Pérez Rubalcaba, ahora distanciada de la dirección de Pedro Sánchez, requirió a la dirección del grupo un análisis tras el "tsunami" que la irrupción de Vox supone para la política nacional.

 

Soraya Rodríguez tomó la palabra para compartir con el resto de los compañeros la lectura que ella hace del 2-D. Sin negar que en el resultado han pesado los 36 años de gobiernos socialistas y los escándalos de corrupción como el caso de los ERE, ha llamado la atención sobre la influencia que ha tenido, a su juicio, haber sacado adelante la moción de censura contra Mariano Rajoy con el apoyo de los independentistas.

Bajo su punto de vista, ésta es la causa que explica el alza de Vox, porque si sólo hubiera influido en los electores el desgaste del PSOE, esos votos se habrían ido a Podemos o Ciudadanos, pero no a Vox. Según su argumentación, el haber contado con los independentistas para sacar adelante la moción ha tenido un "coste" y ha sido un movimiento que no han entendido los votantes socialistas.

Rodríguez también ha expresado su convencimiento de que si Ciudadanos pacta con el PP un Gobierno de derechas en Andalucía contando con los votos de Vox, esto tendrá un coste en su electorado a nivel nacional que el PSOE deberá aprovechar.

En una línea similar a la de Rodríguez se pronunció Barreda, que se quejó ante la dirección por no haber suscitado un debate autocrítico sobre lo ocurrido el 2-D. Al igual que su compañera, él cree que Cataluña ha pesado mucho en el resultado de las andaluzas, como prueba el hecho de que el resto de partidos diseñaran su campaña en clave nacional, a diferencia del acento andaluz por el que apostó Díaz.

También intervino la otra diputada ciudadrealeña, Isabel Rodríguez, que insistió en la necesidad de adoptar una posición clara y definitiva sobre la presentación de los Presupuestos Generales del Estado a fin de no provocar una decepción en los territorios que afrontan el próximo mes de mayo una cita con las urnas.