El salario medio de los castellanomanchegos ha ganado en la actualidad un 3,6% de poder de compra, mientras que hace un año atrás perdió el 1,6%, según el Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo para Castilla-La Mancha. Según ha informado el Adecco Group Institute, centro de estudios y divulgación del Grupo Adecco, en nota de prensa, en el segundo trimestre del año la remuneración media de Castilla-La Mancha ha experimentado un crecimiento de un 3,7% interanual y ha marcado un nuevo máximo histórico con 1.525 euros por mes, el salario más alto para la región según las estadísticas.

No obstante, ha indicado que la magnitud del incremento está "exagerada" por el hecho de que el salario medio del segundo trimestre de 2020 fue el más bajo de los últimos años como consecuencia de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) a raíz de la crisis del coronavirus.

Asimismo, ha precisado que si se descuenta la inflación de la evolución del salario medio, se obtiene la variación del poder de compra y que con las variaciones acumuladas en los últimos ocho trimestres, el salario medio castellanomanchego gana en la actualidad un 3,6% de capacidad de compra. Esto supone 630 euros anuales, de manera que Castilla-La Mancha es la segunda región con mayor crecimiento dentro del grupo que hace un año perdía poder adquisitivo.

Por encima de la media nacional

El comportamiento de esta comunidad autónoma, según Adecco, es aún mejor que el vivido a nivel nacional, donde el salario medio ha ganado un 1,7% de poder de compra cuando hace un año perdía un 1,4%, y supone una ganancia de 349 euros anuales.

Por otro lado, el estudio de Adecco también ha destacado que en Castilla-La Mancha hay en la actualidad 43.900 personas que llevan desocupadas al menos dos años, lo que equivale al 29,5% del total de personas sin empleo, 1,8 puntos porcentuales menos que hace un año.

Si bien, pese al descenso, Castilla-La Mancha ha pasado a ser la autonomía con mayor proporción de parados de larga duración, además de que la proporción de parados que está cubierto por una prestación por desempleo ha bajado desde el 66% hace un año a un 60,4% ahora.

Además, las restricciones a la actividad económica iniciaron una caída generalizada de la siniestralidad laboral en todo el país, pero en el caso de Castilla-La Mancha, en el segundo trimestre del año, ha conllevado un crecimiento del 14,7% frente al 0,1% nacional, lo que supone el mayor aumento entre las distintas regiones.

De hecho, la comunidad autónoma ha registrado 76,6 accidentes laborales que causaron baja cada 10.000 ocupados, el segundo registro más elevado entre las regiones.