El culebrón en el que desde hace ya mucho tiempo se ha convertido el futuro de Kylian Mbappé ha dado varios vuelcos inesperados en los últimos años. Cualquier cosa parece ya posible tratándose de una situación tan peculiar y ahora la situación ha vuelto a sufrir un nuevo giro total después del naufragio en el debut del PSG en la Ligue 1.

Tal y como informó el propio club a través de un comunicado emitido en la mañana de este domingo, el delantero deja de estar apartado y regresa a la dinámica del primer equipo: "Tras unas conversaciones muy constructivas y positivas entre el PSG y Kylian Mbappé antes del partido PSG - Lorient, el jugador se ha reincorporado esta mañana a la primera plantilla de entrenamiento".

Se trata, por lo tanto, de un claro acercamiento entre dos posturas que hasta ahora eran completamente antagónicas. La situación estaba bloqueada y desde hacía varios días Mbappé trabajaba al margen, apartado con el grupo de los indeseables, pero ahora todo cambia de manera radical. 

El París Saint-Germain quiere terminar con el enfrentamiento absoluto que ha enrocado la relación con el futbolista. La idea sigue siendo la de ampliar el contrato por un año más hasta 2025, pero el club le habría prometido al futbolista que le dejaría marchar igualmente en el verano de 2024 al Real Madrid con un traspaso de por medio para recuperar parte de la gran inversión que ha hecho en él. 

RMC Sport apunta que los últimos movimientos que ha hecho el París Saint-Germain durante este verano van en la línea de satisfacer las promesas incumplidas que le habían hecho a Mbappé. El delantero quería un equipo competitivo, desde el entrenador hasta la plantilla, para pelear por todos los títulos, y la entidad se ha movido al respecto. Por eso, están tratando de hacerle ver que están atendiendo sus peticiones.

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La contratación de Luis Enrique viene a saciar una aspiración de Mbappé de tener a un entrenador de primer nivel, y también la llegada de algunos fichajes esta temporada. La incorporación de Dembélé, lejos de entenderla como una amenaza, la venden desde el PSG como un acompañante de lujo en la delantera para Kylian, así como el posible fichaje de Kolo Muani.

Ya no está apartado

Con este acercamiento de posturas Kylian Mbappé deja de estar apartado. Hasta el momento, el futbolista venía entrenándose con el grupo de los indeseables, es decir, los descartes que no cuentan para el club, pero ahora regresa a la dinámica del equipo de Luis Enrique en un claro perdón por parte de la entidad.

El divorcio además entre ambas partes se escenificó por completo este pasado sábado con la disputa de la primera jornada de la Liga francesa. Mbappé ni siquiera entró en la primera convocatoria de Luis Enrique, al igual que tampoco lo hicieron Neymar ni Verratti, por lo que el PSG parecía decidido a dejarle un año entero fuera de los terrenos de juego.

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El debut del conjunto parisino en la competición no fue para nada bueno porque no pudo pasar del empate sin goles en casa ante el Lorient. Al PSG le faltó gol mientras que Mbappé veía el partido desde el palco en la compañía de Dembélé. 

Ahora, por lo tanto, está por ver si después de este claro acercamiento de posturas entre el futbolista y su actual club, se produce un nuevo paso en forma de novedad con su contrato. El club no quiere que se marche gratis este verano mientras que el jugador decía que quería cumplir su contrato.