El Real Madrid lleva varios meses planificando de manera directa su próxima temporada. Para ello, ya se ha movido de forma insistente en el mercado de fichajes. Y uno de sus pasos más importantes ha sido cerrar la llegada de Antonio Rüdiger. El defensa alemán termina contrato con el Chelsea el próximo 30 de junio y ya ha anunciado de manera oficial que no va a continuar en el equipo de Thomas . 

Esto es así porque el central bávaro ya tiene su llegada cerrada al Real Madrid. El jugador aterrizará completamente gratis en cuanto a traspaso se refiere. No obstante, sí cobrará una prima de fichaje que, de cualquier forma, no será muy abultada y siempre menor a lo que hubiera supuesto un fichaje.

Además, para llegar a la 'Casa Blanca', el zaguero ha tenido que reconsiderar sus pretensiones económicas. Había intentado venderse al mejor postor por toda Europa pensando que eso iba a hacer que el Real Madrid le diera el salario que él estaba demandando. Sin embargo, los blancos se mantuvieron firmes en su oferta y finalmente Rüdiger ha terminado rechazando más dinero en otros destinos a cambio de tener la posibilidad de jugar en el Santiago Bernabéu. 

Tras pasar un primer reconocimiento médico con los galenos del Real Madrid en Inglaterra, Rüdiger firmará en breve su llegada al conjunto madridista hasta el año 2026. De esta forma, el club merengue cerrará así la mejor defensa de Europa con un ejército de centrales formado Eder Militao, David Alaba, Nacho Fernández y Jesús Vallejo. El exjugador de equipos como Granda o Eintracht de Frankfurt podría salir en este mercado de verano, pero de momento aguanta buscando un puesto en la plantilla. Además, por los costados aparecen las garantías de Dani Carvajal y Ferland Mendy a la espera de más refuerzos.

David Alaba y Eder Militao, en El Clásico. AFP7 / Europa Press

Un velocista en crecimiento

El fichaje de Antonio Rüdiger a sus 29 años por el Real Madrid ha despertado una postura generalizada en el mundo del fútbol: otro golpe encima de la mesa de Florentino Pérez y todo su equipo. El conjunto blanco se va a hacer con uno de los mejores defensas de toda Europa a coste cero y lo va a unir a la mejor pareja de centrales del mundo: Militao y Alaba. De esta forma, tendrá un ejército defensivo que será casi inexpugnable. 

Rüdiger lleva varios años siendo uno de los mejores defensores de la Premier League y liderando la zaga de un equipo que en el último año y medio se ha convertido en una roca atrás. El conjunto de Thomas Tuchel se consagró como campeón de la Champions gracias a su fortaleza atrás y buena parte de la culpa de ese éxito la tuvo 'Rudy'. 

Su estilo de juego está marcado por su velocidad. Esta temporada se ha convertido en el jugador más rápido de toda la Premier League al marcar una punta de 36,7 kilómetros por hora. Una auténtica barbaridad a la altura de los extremos y laterales más fugaces del planeta. Un registro más propio de un jugador de otra posición. 

Sin embargo, esta gran capacidad para correr a campo abierto le permite ser uno de los mejores defensas del mundo en el manejo de las distancias y en la capacidad para jugar muy lejos de su portería, metiendo al rival en la suya propia. A Rüdiger no le preocupa dejar metros a su espalda porque sabe que su gran zancada le permite recular y recuperar el terreno perdido cuando es necesario. 

Eso, para un equipo acostumbrado a jugar en campo rival como el Real Madrid, es clave. Además, el alemán es un futbolista muy inteligente. Sabe perfectamente donde están sus limitaciones y se dedica a jugar fácil y sencillo. Es capaz de mover muy rápido el balón desde la zaga, a dos toques, y buscando siempre al hombre de elaboración en mejor posición y más liberado. Pero si no lo encuentra, tiene capacidad de sobra para aprovechar su velocidad rompiendo líneas en conducción. Y a ese ritmo de relámpago es casi imposible de parar. 

Antonio Rudiger, durante un partido del Chelsea FC. AFP7 / Europa Press

Se trata también de un jugador realmente fuerte en lo físico y muy alto. Gracias a su 1,90 metros de altura, el Real Madrid recupera con Rüdiger parte del poderío aéreo perdido con la salida de jugadores como Sergio Ramos, Raphael Varane, Cristiano Ronaldo o Gareth Bale. El bávaro puede ser un filón tanto en ataque como en defensa. 

En los últimos tiempos se ha acostumbrado a jugar en un esquema de tres centrales, casi siempre por el perfil izquierdo, pero puede formar en una línea de dos más habitual con total solvencia. Su versatilidad le permite adaptarse con rapidez a los dos sistemas sin que el equipo sufra. Además, en el último curso ha mejorado y mucho de cara a la portería rival. 

En los seis años que pasó entre el Stuttgart y la Roma anotó solo cuatro goles. Sin embargo, en las cinco temporadas que ha pasado en el Chelsea ha marcado un total de 12. Además, esta temporada ha sido la más destacada firmando cinco dianas. Una de ellas precisamente en el Santiago Bernabéu, donde hizo un partido colosal y demostró a su futuro equipo su grandeza, su jerarquía y su calidad en citas importantes. 

Los orígenes de Rüdiger

Antonio Rüdiger se ha consagrado ya como uno de los mejores defensas del mundo. Sin embargo, la suerte no siempre le ha sonreído como ahora. 'Rudy' nació en Berlín en el seno de una familia muy humilde de inmigrantes llegados desde Sierra Leona. Mientras él y su padre Matthias sí tienen nacionalidad germana, su madre Lily mantiene sus orígenes africanos. 

Ambos tuvieron que huir de su país en el año 1991 con motivo de una guerra civil que había estallado en la zona. Solo querían algo mejor para sus hijos, que pudieran nacer lejos del conflicto. Se mudaron hasta la ciudad de Berlín y allí fue donde nació y creció el futuro jugador del Real Madrid, concretamente en el conflictivo barrio de Neukolin. El futbolista alemán tuvo que crecer viendo el crimen de cerca e intentando esquivar la mala vida que germinaba en aquella comuna ahora convertida en lugar de llegada habitual de inmigrantes como lo fueron sus propios padres. 

A pesar de que siempre fue un enamorado del fútbol, Rüdiger no dio sus primeros pasos encaminados hacia el profesionalismo hasta una edad muy tardía. Permaneció hasta los 15 años aprendiendo de manera autodidacta lo que el balompié callejero le enseñaba. Sin embargo, sus cualidades eran ya increíbles. De hecho, comenzó jugando durante mucho tiempo como delantero y también como mediocentro. Así se explica que dos de sus mayores referentes de juventud fueran George Weah y Ronaldo Nazario. Del brasileño decía cuando todavía era un niño que era el delantero perfecto porque lo tenía absolutamente todo. 

Ronaldo Nazario con el Inter Inter de Milán

Rüdiger creció siendo un niño tranquilo, calmado y muy reflexivo que se comportaba igual dentro del campo, pero sin perder la agresividad y la intensidad que le nacían dentro con la competición. Analizaba cada acción aplicando siempre la mejor solución en cada jugada. Así lo confesaba hace unos años Dirk Jacob, quien fuera su mentor cuando todavía era un juvenil. 

Su salto a la élite lo dio en las filas del Stuttgart, dando sus primeros pasos en el equipo filial en Tercera División para después llegar a la Bundesliga con el primer equipo. De ahí pasó a la Roma para después consagrarse en el Chelsea como uno de los mejores defensas del mundo. Una carrera en ascenso hasta llegar al nuevo campeón de Europa.

A pesar de haber nacido en Alemania y de ser internacional con la Mannschaft, Rüdiger es una persona que siente muy profundamente sus raíces de Sierra Leona. Se define como practicante de la región musulmana y lleva su vida personal dentro de una privacidad muy estricta. Es padre de familia numerosa y ha tenido que convivir en muchos momentos de su carrera con la lacra del racismo. 

De hecho, ha sido víctima de cánticos xenófobos e insultos tanto en Italia como en Inglaterra. Episodios que le llevaron a escribir un impactante artículo en el medio The Players Tribune que se llamaba Este artículo no acabará con el racismo en el fútbol. En él narraba diferentes experiencias para que los aficionados pudieran conocer el daño que pueden hacer algunos de sus cánticos dentro de un campo de fútbol en un momento de locura y éxtasis. Además, también daba su opinión sobre las formas de combatirlo. 

Así es Antonio Rüdiger, un futbolista que destaca por su velocidad y su corrección en el terreno de juego y por su privacidad y su compromiso social fuera de él. Ahora llega al Real Madrid para cumplir la que será la etapa más apasionante de su carrera deportiva.

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