El Real Madrid cuenta de forma indudable con Carlo Ancelotti, pero desde Alemania han dado un nombre para el futuro de la entidad merengue. Si hay un entrenador que ha destacado esta temporada en el país germano ese es Oliver Glasner. El técnico del Eintracht ha devuelto a este club a la gloria europea al conseguir la Europa League. El equipo de Frankfurt ha vuelto a situar esta ciudad en el mapa del fútbol continental y ahora empieza a ganar enteros entre los grandes.

Bild informa este martes que el técnico está en la cartera del Real Madrid para el futuro. Tras haber clasificado al Wolfsburgo a la Champions League, Markus Krösche le convenció para liderar su proyecto en el Eintracht. El director deportivo le consiguió refuerzos jóvenes como los centrocampistas Jesper Lindström, Jens Petter Hauge y Kristijan Jakic, al extremo Ansgar Knauff que reconvirtieron en carrilero y al delantero Rafael Santos Borré, que llegó en sustitución del goleador André Silva. Con ellos ha creado una plantilla campeona.

La de Glasner es una historia de supervivencia real. El 4 de agosto de 2011 los cirujanos de una clínica en Copenhague salvaron la vida al exjugador del SV Ried. El austríaco sintió dolor al rematar de cabeza en la sesión previa al encuentro de playoff de la antigua UEFA ante el Brøndby danés y se le terminó diagnosticando un coágulo de sangre en el cerebro que provocó una operación de urgencia. Esos ejercicios del entrenamiento le libraron de una muerte más que probable.

Filosofía especial

Supuso el final de la carrera para el jugador de 36 años que, siguiendo los consejos de su esposa Bettina, se sacó el título de entrenador y terminó recalando en el Red Bull Salzburgo, donde ejerció de segundo de Roger Schmidt. Junto a otro de esos entrenadores que se han empapado de la filosofía de Jurgen Klinsmann, Glasner fue creciendo. No llegó a entrenar en el gigante de las bebidas energéticas, pero sí comenzó su carrera en Austria.

Tras pasar por los banquillos del Ried y del LASK, Glasner dio el salto a una Bundesliga en la que hizo del Wolfsburgo un equipo de Champions en su segunda temporada. Su progresión empezaba a ser para tener en cuenta. Podía haber dado ese salto en la máxima competición continental, pero se sintió atraído por el proyecto del Eintracht. Querían que desarrollara su idea de juego: presión tras pérdida, juego directo y transiciones rápidas.

Oliver Glasner, durante un partido. Jan Woitas / dpa-Zentralbild / dpa

42 años después, las 'Águilas' volvieron a sobrevolar en Europa con éxito. Glasner tuvo un comienzo turbulento en el Eintracht. El equipo de Frankfurt cayó eliminado de la DFB Pokal ante un Tercera. Lejos de poner en duda su trabajo, confiaron aún más en él. Tampoco fueron bien las cosas en la Bundesliga. Acabó en la undécima posición. Aún así, todo ha quedado compensado con el hecho de levantar la Europa League.

Además, el premio viene acompañado de la clasificación para la Champions. En esta ocasión sí la va a disputar y tratará de reeditar el buen camino que tuvo el último campeón de la Europa League. El Villarreal llegó hasta las semifinales de la máxima competición continental.

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