Olympiacos volvió a remontar en el último cuarto guiado por la mano mágica de Spanoulis. A pesar del gran partido realizado por CSKA, los griegos se salieron en los minutos finales aprovechando el miedo que tenían los rusos por las anteriores citas contra el conjunto heleno. Una historia que se volvió a repetir en lo que fue un verdadero partido de Final Four. (Así vivimos el partido en directo).

El encuentro comenzó con la ventaja griega en las gradas. Además, esta superioridad la intentaron instaurar en el campo llevando la iniciativa, pero el desacierto de cara a canasta -sobre todo desde el triple- les condenó. CSKA cedía toda responsabilidad ofensiva a sus bases, y estos no defraudaron, rompiendo De Colo y Jackson la defensa helena a su antojo. Mientras tanto, Olympiacos centraba sus ataques en Printezis. Fue este quien palmeó una canasta para cerrar el cuarto con un escaso 18-12.

Ya en el segundo tiempo apareció quien todos esperaban. Milos Teodosic, uno de los mejores jugadores del continente, le dio a su equipo el punto necesario para alejarse. Con 10 puntos casi consecutivos -varios de ellos desde el perímetro- abrió el marcador e instauró el 36-25. Sin embargo, un triple fundamental de Agravanis sobre la bocina redujo las distancias y mantuvo con vida a Olympiacos (40-33).

VUELVEN LOS FANTASMAS DEL PASADO RUSO

A pesar de alcanzar los once puntos de distancia, el CSKA apenas sumaba en juego y solo aumentaba su puntuación desde la personal. Y es que el tercer cuarto fue un continuo lanzamiento de tiros libres del cuadro ruso. Cada ataque, por inofensivo que fuese, terminaba con uno de sus jugadores en la línea de personal.

Hasta que Olympiacos aprovechó su racha y se impulsó en el luminoso a base de triples. Mantzaris cambió su dinámica hasta el momento y sacó un 4/7 desde el perímetro. Le siguió la estela Papanikolaou y tampoco se quedó atrás Agravanis. De tal forma, los de Sfairopoulos se recuperaron y terminaron a escasos cuatro puntos (64-60).

SPANOULIS LE GANA A TEODOSIC

Ambos jugadores fueron los líderes de sus respectivos equipos tal y como se preveía. Sin embargo, el griego fue mejor e impulsó a su equipo para ganar. En un último cuarto de locura con un final de infarto, Spanoulis se echó el equipo a la espalda y decantó la balanza para terminar con un 78-82. Además, un triple clave de Green -desacertado hasta ese momento-, terminó por decidir.

Un total de 14 puntos y 13 de valoración que, aunque no son grandes datos, se convierten en fundamentales puesto que la mayoría de ellos los cosechó en los últimos diez minutos. Teodosic estuvo mucho más acertado con 23 puntos y 17 de valoración que no fueron suficientes para darle una plaza en la final a CSKA. De esta manera, la historia que se produjo en la Final Four de Madrid en 2015 se vuelve a repetir.

CSKA MOSCÚ – OLYMPIACOS

CSKA Moscú: De Colo (16), Jackson (12), Kurbanov (2), Vorontsevich (2), Hines (8) -cinco inicial- Teodosic (23), Fridzon (0), Antonov (-), Higgins (6), Augustine (6), Freeland (-), Khryapa (3).

Entrenador: Dimitris Itoudis.

Olympiacos: Mantzaris (12), Spanoulis (14), Papanikolau (14), Printezis (14), Milutinov (5) -cinco inicial- Green (8), Birch (4), Toliopoulos (-), Waters (-), Agravanis (8), Young (0), Papapetrou (3).

Entrenador: Ioannis Sfairopoulos.

Árbitros: Hierrezuelo (ESP), Javor (SLV), Lottermoser (ALE).

Parciales: 18-12 | 22-21| 24-27 | 14-22

Incidencias: Partido correspondiente a la primera semifinal de la Final Four de Estamul. El encuentro se disputó en el Sinam Erdem Dome.