Adiós a los móviles Android pequeños: por qué han dejado de tener su hueco en los lanzamientos del 2025

Se suele decir que los móviles llevan décadas sin cambiar, prácticamente desde que Apple lanzó el iPhone en 2007. La realidad es que en países como España antes de ese año teníamos todo tipo de propuestas diferentes, desde dispositivos que emulaban ser una videoconsola a otros que buscaban ser lo más estéticos y ligeros posibles.

El proceso de cambio se ha ralentizado, y los usuarios en España aguantan más sus móviles pero también gastan más a la hora de renovarlos. Actualmente el precio medio está en torno a los 315 euros en 2024, por encima tanto de la media europea, de 297 euros, y de la mundial, de 264 euros. Y no parece que vaya a bajar.

Las marcas buscan mantener la lealtad de sus compradores, que en nuestro país se coloca en un 55%, mientras atraen a otros potenciales comparadores, para lo cual suelen crear nuevas estrategias. Pero no todas son válidas. Hay algunas que, aunque parezcan obvias, no funcionan.

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Cuando Samsung presentó el Samsung Galaxy Note original lo hizo bajo la apuesta de ofrecer un dispositivo con una pantalla mucho más grande de lo que habíamos visto hasta el momento: 5,4 pulgadas. Y esa cifra era considerada enorme. Actualmente no es que esa sea una diagonal especialmente pequeña, es que directamente no hay móviles, al menos de empresas importantes, con ese tamaño de pantalla.

Los móviles más compactos de firmas reconocidas como Samsung o Apple superan las 6 pulgadas y llaman la atención por lo pequeños que son. La diagonal media se establece en torno a las 6,7 o 6,8 pulgadas con modelos como el Samsung Galaxy S25 Ultra que llegan a las 6,9 pulgadas.

Podríamos pensar que en el camino se ha perdido un público que valoraba tener un móvil pequeño y compacto pese a que se perdiera por el camino cierta comodidad de uso en algunas situaciones. La realidad es que en la última década no son pocas las marcas que han lanzado propuestas de smartphones que cumplieran con esas dimensiones pero las ventas han demostrado claramente que no se venden en número suficiente como para que sean rentables.

El mejor ejemplo lo tenemos en el iPhone Mini, un modelo que Apple ha estado intentando promocionar durante algunos ejercicios y que finalmente ha descatalogado ante la evidencia de que los consumidores no lo querían, al menos no en el número suficiente como para que fuera un proyecto rentable económicamente. Lo más parecido que tenemos ahora a eso es el iPhone 16e, y aún así tiene 6,1 pulgadas.

Los problemas de los Mini

Batería. Cuando un dispositivo es pequeño implica que en su interior hay espacio para menos cosas. Eso afecta más al componente más voluminoso, la batería. Los móviles Mini siempre han sido los que menos autonomían han tenido, al menos en comparación con sus hermanos mayores.

El caso del móvil de Apple es un buen ejemplo y es que la primera iteración del iPhone Mini fue criticada justamente por eso. No obstante, esta desventaja podría tener los días contados con las nuevas baterías de silicio y carbono, que están permitiendo poner pilas de 6.000 o 7.000 mAh en móviles normales y podrían hacer que los móviles pequeños tuvieran baterías de 6.000 mAh, lo que hasta hace no mucho era terreno exclusivo de los móviles más grandes.

iPhone 12 mini y iPhone 12 Pro Max Chema Flores Omicrono

Conectividad. A medida que la conectividad va evolucionando se van necesitando más antenas, y eso ocupa espacio. El paso del 4G al 5G ha supuesto un incremento en el espacio necesario notorio, sobre todo en los modelos para mercados como el estadounidense, al que además de las antenas 5G normales hay que sumarles las de la banda milimétrica.

Funciones como WiFi 7 también requieren no sólo de cierto espacio, sino de colocarse en ciertos lugares para que la recepción sea lo mejor posible y se puedan desarrollar las altas velocidades que esos protocolos son capaces de generar. Esto no sería problema en móviles de gama de entrada, pero los Mini siempre apuestan a un público que busca la gama alta.

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Pantalla. Cuando tenemos un móvil pequeño tenemos una pantalla pequeña, es normal. El problema es que nos hemos acostumbrado a hacerlo todo con el móvil y eso puede implicar que tener una pantalla pqueña sea incómodo en ciertas circunstancias.

Además, al ser la mayoría de móviles de un tamaño concreto, el diseño de las interfaces de las apps y juegos se estudian y crean teniendo en cuenta esas dimensiones de pantalla, y ajustarlas a pantallas más pequeñas suele resultar en una interfaz menos cómoda de usar.

ASUS Zenfone 9 Álvarez del Vayo El Androide Libre

Eficiencias y diseño térmico. Otro aspecto poco conocido es que los moviles necesitan cierta superficie para poder disipar el calor que generan los componentes interiores. Los móviles gaming, por ejemplo, tienen sistemas de cámaras de vapor avanzados que, poco a poco, se van viendo en modelos normales.

El problema de los modelos compactos es que no hay espacio para poder implementar este tipo de soluciones. Los procesadores modernos son capaces de ser mucho más eficientes, pero aún así hay ciertas limitaciones físicas.

Pese a todo, hay resistencia

Aunque el mercado ha dejado clara sus preferencias, aún hay marcas, muy pocas, que se esfuerzan en crear dispositivos de tamaño aceptablemente compacto, intentando solventar los problemas mencionados. Un buen ejemplo es VIVO, que presentó el VIVO X200 Pro Mini en el evento de lanzamiento de sus móviles de gama alta en octubre.

Este smartphone estaba originalmente destinado a ser vendido sólo en China, pero cada vez hay más rumores de que se venderá también en mercados internacionales, seguramente ante la falta de competencia. Sí, el sector es pequeño porque no hay mucha demanda, pero si eres la única opción puede que te compense la apuesta.

Módulo de cámara del VIVO X200 Pro Mini Álvarez del Vayo El Androide Libre Beijing (China)

También parece que hay una evolución en el concepto de móvil compacto. En vez de disminuir el ancho y el largo las marcas están estudiando cómo disminuir de manera radical el grosor. Ya hay rumores de que Apple entraría en este mercado, y Samsung ya ha anunciado el Samsung Galaxy S25 Edge que, en principio, se lanzaría a lo largo de este año.

Quizás veamos nuevas apuestas en este sentido de marcas como OPPO o OnePlus, que se rumorea lanzarían un móvil compacto, aunque no se sabe si llegarían fuera de China. Con todo, parece que el gran público no quiere móviles pequeños, quiere móviles competentes que, en la medida de lo posible, les permitan hacer todo lo que quieren sin recurrir a una tablet, un ordenador o cualquier otro tipo de dispositivo.