Desde que Facebook anunció que compraba Whatsapp, parece que sólo hay sitio para las malas noticias para la compañía WhatsApp. Hace unos días, sus servicios dejaban de funcionar provocando un revuelo en Internet.

A WhatsApp le crecen los enanos

Ahora llega otra mala noticia para la compañía. Y es que la startup suiza Threema ni siquiera esperaba esto: En tan sólo 24 horas, la compañía ha doblado su base de datos de usuarios. Tras estos datos, ahora se han situado a la cabeza de las aplicaciones de pago en Alemania.

Threema es una aplicación de mensajería móvil que fija su obsesión en la seguridad. Provee encriptación real en el canal de comunicación extremo a extreno, de modo que sólo los destinatarios elegidos pueden leer los mensajes. Así lo detallan ellos en su misma web:

A diferencia de otras aplicaciones de mensajería famosas (incluyendo aquellas que presumen de utilizar encriptación), incluso nosotros como el servidor de la aplicación no tenemos ninguna forma de leer tus mensajes.

Al parecer, desde la adquisición de WhatsApp por parte de Facebook, muchos usuarios alemanes habrían podido migrarse a esta nueva app con el fin de evitar usar una aplicación propiedad de Facebook. Para estos usuarios, WhatsApp tuvo grandes agujeros de seguridad en el pasado, a pesar de su apuesta por la seguridad. Y ahora, con más motivos, desconfían de una aplicación controlada por otra compañía centrada en la publicidad después de todo (Facebook).

Desde la red social Facebook no han parado de prometernos que WhatsApp no cambiará y será totalmente independiente, descartando el modelo de negocio que ellos mismos siguen basado en la publicidad. Pero tanta promesa parece no ser suficiente en Alemania.

¿Líder indiscutible?

Actualmente, WhatsApp cuenta con unos 30 millones de usuarios en Alemania, siendo el líder indiscutible. Pero este movimiento de salto de plataforma hacia un nuevo proveedor de servicios resulta, al menos, interesante. Y más cuando ¡Threema tiene sólo 3 trabajadores! viéndose abrumados por las solicitudes de soporte.

La aplicación es, en realidad, muy parecida en comportamiento y diseño a WhatsApp, excepto en el hecho de no poder ver los mensajes, pues ni los servidores de administración disponen de las claves de encriptación.

Incluso desde el comisionado de protección de datos para Schleswig-Holstein (Alemania) se han pronunciado al respecto:

Facebook lo ve todo. Y WhatsApp también lo ve todo.

Y parece que no son los únicos que piensan eso, pues en total han sido unos 200.000 nuevos usuarios en Threema que pagaron 1.99 dólares (el 80% de ellos alemanes).

Personalmente no veo WhatsApp como la mejor aplicación de mensajería, y más teniendo en cuenta otras como puede ser Hangout, a mi modo de ver mucho más cuidadas en el detalle. Pero el gran valedor de WhatsApp es la cantidad de usuarios que lo utilizan. El problema es que un día ese deje de ser ese gran valedor.

La pregunta que debemos hacernos es: ¿será WhatsApp capaz de demostrar que la privacidad es una de sus prioridades? ¿Parará la migración a otras plataformas? Y lo más curioso desde la compra por parte de Facebook, ¿pararán las malas noticias para la compañía?

Fuente | Süddeutsche