Fuel Fandango: "El flamenco más marginado es el de los gitanos"

"¿A quién no le gusta Lorca?", se pregunta Nita (Cristina Manjón) en el Tablao Flamenco Villa Rosa (Madrid), junto a su compañero inseparable Alejandro Acosta. Ella de Córdoba y él de Lanzarote, siempre han tenido muy presente la cultura andaluza pese a los kilómetros de mar que les separan. En 2010 fundaron Fuel Fandango, un dúo en el que plasmaron su amor por el flamenco unido a otros estilos como la electrónica, el rock, el pop o incluso detalles de la música latinoamericana y afrocubana. 

Ahora, tras una década sobre los escenarios, lanzan su nuevo disco, Origen, en el cual han trabajado año y medio y está a la venta desde el 24 de enero. En una entrevista concedida a EL ESPAÑOL, afirman que siguen siendo de la "vieja escuela" y que prefieren lanzar un álbum a varios singles. Explican, asimismo, que aunque también actuarán en ciudades como Londres, esta vez pretenden "centrarse en España".

Quizá por ello Origen destaca principalmente por ese toque latino que siempre ha estado pero que ahora tiene mayor protagonismo que en otros discos. Un claro ejemplo de ello es Mi danza, un tema que comienza con una escena inicial en el que el padre se muestra reacio a que su hija pequeña baile flamenco.

Nita creció muy ligada a la danza y, pese a que sus padres siempre la empujaron a perseguir sus sueños, quiso evidenciar una realidad paralela donde el baile no siempre es bienvenido en todos los hogares. "La danza no esta lo valorada que debería estar. Si los músicos a veces pasamos fatiga, Los bailarines ya ni te cuento", considera la cantante cordobesa.

El flamenco, género internacional

No obstante, ese rechazo hacia uno de los patrimonios culturales españoles, que derrocha clasismo y en muchos ámbitos xenofobia, cada vez es menos frecuente. El flamenco se ha internacionalizado de forma progresiva gracias a diferentes artistas con calado internacional. 

"Es maravilloso que el flamenco esté vivo", comenta Nita y aplaude el éxito que está teniendo Rosalía en este ámbito. Lo mismo opina Alejandro, quien cree que el género no solo trasciende fronteras sino que también "ha entrado en las nuevas generaciones". Dellafuente y otros artistas andaluces han sabido adaptar este estilo centenario a nuevos géneros como el trap y la música urbana. "Veo riqueza y no descartamos nada. En este disco se nota la influencia de las bases y de ese bombo y caja del trap. Queríamos evolucionar y llegar a nuevos sonidos", responde el lanzaroteño sobre la posibilidad de incluir el trap a su repertorio.

Por su parte, Nita no ha querido olvidarse del flamenco más puro y a la vez más olvidado o ninguneado actualmente. "El flamenco que está más marginado es el de los gitanos, por desgracia. A los gitanos habría que darles mucha más visibilidad y valor en el flamenco porque son una pieza fundamental en nuestra cultura y nuestras tradiciones; tanto a nivel andaluz como a nivel español", opina.

Fuel Fandango estará en Madrid actuando el 1 y 2 de febrero. Tras este doble concierto en la capital, pasará por ciudades como Mallorca, Málaga o Granada con ese ritmo tan heterogéneo que les caracteriza.