Paulina Rubio en una fotografía de archivo. Gtres
Paulina Rubio, acusada de una presunta agresión a su hijo Nicolás en Miami: la juez la obliga a ir a terapia familiar
La mexicana se enfrenta a una nueva orden judicial en medio de su larga disputa legal con Colate Vallejo-Nágera. La justicia escuchará al menor.
Más información: Colate y Paulina Rubio, 13 años en guerra por la custodia de su hijo: desacuerdos, acusación de secuestro y retiro de pasaporte
La guerra parece no dar tregua entre la cantante mexicana Paulina Rubio (53 años) y el que fue su marido, Colate Vallejo-Nágera (53). El pasado mes de marzo, la exdupla se vio las caras en la corte de Estados Unidos, con motivo de la custodia de su único hijo en común, Andrea Nicolás (14).
Una cita de muchas con la justicia en estos largos 13 años. Desde que pusieron fin a su historia de amor en 2012, las demandas entre el exmatrimonio han sido constantes, así como la animadversión manifiesta. La artista mexicana ha demandado a su exmarido en más de 50 ocasiones.
No hay entente ni buena relación posible entre las partes, por más empeño que se haya puesto. Todo ello, con su hijo en común de por medio. El pasado marzo, en el último desacuerdo hasta la fecha, la cantante acusó a Colate de poder "secuestrar al menor -a Nicolás hijo- para llevárselo de Miami sin su consentimiento".
Paulina Rubio en una fotografía tomada durante la promoción de 'La Voz Senior'. Gtres
Tamaña acusación tuvo que ver con el hecho de que Colate recibió a su vástago del colegio para festejar su 53º cumpleaños. En medio de este delicado trance, este pasado lunes, día 26 de mayo, se ha conocido otro episodio que, lejos de apaciguar, enmaraña aún más la situación.
La chica dorada, como se la conoce a nivel internacional, ha sido acusada de un presunto maltrato físico hacia su hijo Nico -como lo conoce su entorno más íntimo-. Los hechos, según relatan algunos programas de Estados Unidos -y han sido secundados por Amber Glasper, cuidadora de la casa-, han acaecido en Miami.
En concreto, en la casa de la artista. Allí, madre e hijo, siempre según esta versión, han librado una fuerte discusión por el uso del teléfono móvil que estaba haciendo el menor. En esa coyuntura, Paulina le habría propinado un manotazo a su vástago. Un episodio que acabó en gritos.
Fueron estas voces las que alertaron a la cuidadora, Amber, quien llamó a la policía. En cuestión de minutos, varios agentes se personaron en el domicilio de la cantante, y dieron parte a la tutora del menor, una figura legal obligatoria en el sistema judicial de Estados Unidos, máxime cuando existen divorcios complejos.
El exmatrimonio, en una instantánea tomada en 2011. Gtres
Fue esta figura legal la que trasladó el caso a los juzgados. El pasado viernes, 23 de mayo, se celebró una audiencia virtual en la que dio su versión de los hechos tanto Paulina como la trabajadora del hogar. Esta última asistió en calidad de testigo. La jueza ni lo dudó: le ha impuesto a Paulina Rubio acudir a terapia familiar.
En el espacio Y ahora Sonsoles, este pasado lunes, se ha abordado la cuestión. "La única buena noticia para Colate y su hijo es que finalmente un juez le va a preguntar dónde quiere vivir", aseguró la periodista Beatriz Cortázar.
Este último suceso tiene lugar, además, después de la polémica portada que protagonizó, semanas atrás, Paulina Rubio junto a sus dos hijos, en la portada de ¡HOLA! México. Tal y como se ha sostenido en diferentes medios, Colate Vallejo-Nágera mostró su disconformidad con el hecho de que su hijo posara en el papel couché.
No sólo esto: se puso de manifiesto que Colate no fue avisado y no dio, pues, su consentimiento como padre para que ese reportaje fotográfico tuviera lugar.
La decisión de Nicolás hijo
Nico, el hijo de Paulina y Colate, vive en Miami con su madre, pero se ha manifestado en más de una ocasión que no quiere residir en Estados Unidos, sino en España, junto a su padre. "A mi hijo le encantaría estar aquí con su abuela", reconoció Colate, cabizbajo, hace un tiempo.
"Le encanta España. Es español a muerte", agregó Colate. "Es mi hijo y, a pesar de sus circunstancias incomprensibles, yo estoy ahí siempre, siempre. Y voy a estar siempre, claro que sí", apostilló recientemente el empresario, demostrando que Nicolás es su principal prioridad.
"Está claro que con lo que ha pasado tienes que pensar que esa persona no está obrando con racionalidad. Creo que a lo mejor no está capacitada para tomar ciertas decisiones", ha reflexionado el hermano de Samantha Vallejo-Nágera (55).