El pasado sábado, 9 de julio, los Preysler se reunieron en Sotogrande, Cádiz, para celebrar el matrimonio de Álvaro Castillejo y Cristina Fernández. Tras casi un año de retraso, debido a las restricciones impuestas por la Covid-19, la pareja se dio el 'sí, quiero' en la Iglesia de Nuestra de la Merced ante más de 200 invitados.

Cinco días después de la boda, ambos siguen celebrando, felices y muy agradecidos con aquellos que hicieron posible la ceremonia y el convite. Así lo reflejan sus respectivos perfiles de Instagram, donde han compartido algunos detalles del festejo, mientras se mantienen enfocados en sus próximos viajes. 

Tal y como adelantó EL ESPAÑOL, la luna de miel oficial llegará el próximo octubre. En una conversación con este medio, que tuvo lugar en la inauguración de Red Project, el restaurante de sushi del empresario, Cristina Fernández aseguró que prevén hacer un "superviaje" cuando acabe la temporada estival porque Álvaro tiene que trabajar la mayor parte del verano. El viaje de novios, tal y como ha desvelado la revista ¡HOLA!, tendrá lugar en África, "un destino soñado por los dos". 

Cristina Fernández y Álvaro Castillejo intercambiándose un romántico beso tras darse el 'sí, quiero'. Gtres

Pero antes, los recién casados disfrutarán de un viaje más corto. En su momento, Cristina Fernández comentó a este periódico que al matrimonio en Sotogrande le seguiría una escapada breve. El destino, según ha confirmado ahora la periodista a la mencionada cabecera rosa es La Toscana para "recargar pilas". 

Tras regresar de Italia y mientras llega la gran luna de miel, los recién casados continuarán enfocados en sus proyectos profesionales. Y es que en medio de los preparativos de la boda, el primo favorito de Tamara Falcó (40 años) emprendió varios proyectos que lo han mantenido ocupado en los últimos meses. Después de triunfar con una exclusiva propuesta asiática a domicilio, Álvaro Castillejo abrió un local de sushi en el corazón de Recoletos. 

[Isabel Preysler, una madrina radiante en la boda de su sobrino Álvaro Castillejo]

Pero este no era el primer restaurante que inauguraba el sobrino de Isabel Preysler en la capital. El pasado enero abrió en las inmediaciones del Retiro un exclusivo japonés de lujo, denominado Zeitaku. Se trata de una propuesta basada en la cocina nipona, en la que tienen protagonismo el caviar, los nigiris, tartares, ceviches, tiraditos, sashimis, uzuzukuris o gunkan.  

La apertura de ambos locales, precisamente, determinó los papeles de la pareja en la planificación de su boda. Ambos comentaron a este medio que, mientras Álvaro se enfocaba en los negocios, Cristina gestionaba los detalles del enlace con la ayuda de una wedding planner. Eso sí, el empresario también tuvo una importante participación.

Cristina Fernández y Álvaro Castillejo Preysler, felices tras darse el 'sí, quiero'. Gtres

"He tenido mucha suerte, porque tengo a Cristina que se ha encargado más de la boda, aunque yo también he colaborado", comentó el empresario a este medio. La novia confirmó esta información y explicó: "Los ratitos que llega a casa a descansar, lo secuestro un ratito para planificar".

El resultado de la planificación se vio el pasado 9 de julio, cuando el novio llegó del brazo de su tía Isabel Preysler (71) para darle el 'sí, quiero' a su ya mujer. Beatriz, la madre del empresario y hermana de la socialité, falleció en 2011. Minutos más tarde fue la novia quien caminó hasta el altar, al lado de su padre y ataviada con un vestido de alta costura de Pronovias, confeccionado en brocado marfil. Tras la ceremonia, los recién casados y un selecto grupo de invitados, entre los que destacaron rostros patrios conocidos, disfrutaron de una gran fiesta. 

Hasta la celebración en Sotogrande se acercaron los primos de él, Tamara Falcó, Julio José Iglesias (49) y Ana Boyer (33) junto a su marido, Fernando Verdasco (38). También asistieron otros vips, como Vicky Martín Berrocal (49), Luis Alfonso de Borbón (48) y su mujer, Margarita Vargas (38). Una fiesta que nada tuvo que ver con la pedida de mano. 

Fue el pasado 28 de mayo, cuando la pareja celebró su compromiso en la más estricta intimidad. Entre los invitados se encontraban Tamara Falcó, Íñigo Onieva (32), Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa (86), la nueva familia política de Cristina Fernández.