Son muchas -pero muchas- las ventajas de tener una madre o un padre famoso. Depende también, cómo no, del nivel de su poder e influencia, pero en esta caso, de verdad, el privilegio puede despertar nuestra envidia. El pasado fin de semana, Kim Kardashian (42 años) preparó una sorpresa que su hija, North West (9), su sobrina Penelope Disick (10), una de las hijas de Kourtney (44) y algunas de sus amigas jamás olvidarán.

La empresaria pidió que no faltar un detalle en su jet privado, Kim Air: música y cócteles -por supuesto sin alcohol- temáticos con motivo de un gran acontecimiento. Al subir al avión, las niñas ya supieron a donde irían: desde Los Ángeles hasta Las Vegas volaron para asistir al concierto de Katy Perry (38). Y no fue suficiente con eso.

La intérprete de temas como California Gurls, Dark Horse o Unconditionally llamó a North West y la subió al escenario. No sólo a ellas, sino también a todas sus amigas, que bailaron, divertidas y alocadas al ritmo de una de sus artistas favoritas. Una noche de ensueño y que la primogénita de Kanye West (45) no olvidará jamás. 

[Kim Kardashian compra una de las joyas más espectaculares de Lady Di por casi 200.000 euros]

Para la ocasión, Kim lució un outfit del que EL ESTILO de EL ESPAÑOL conoce todos los detalles. Se trata de un mono sin mangas, de cuello alto y con tela brillante. "El catsuit de cuerpo entero perfecto para lucir tu figura con su ajuste ceñido a las curvas y su aspecto brillante y llamativo. Cuenta con un falso escote y cremallera en el centro de la espalda. Se ajusta a la talla", expresan desde la página web de la firma de Kim Kardashian. Su precio es de 128 dólares (unos 152 euros).

En sus pies, lució unas botas over-the-knee de la firma hispano-británica Manolo Blahnik que ya pudimos vérselas en uno de los momentos más especiales de su vida profesional y personal. Esto es, cuando le dieron la oportunidad de presentar Saturday Night Live en Nueva York. En aquella ocasión las conjuntó con una chaqueta de Balenciaga.

[La enfermedad de Kim Kardashian que disimula pintando partes de su cuerpo]

El precio es de estas botas tan especiales, en colaboración de Blahnik x Vetements era de 950 euros. Ahora mismo se encuentran agotadas. En su mensaje de Instagram junto a esta hilera de fotos, Kim ha querido tener un guiño gracioso: "Lo más divertido del asunto es que la Power Ranger Rosa se llama Kimberly". Exactamente como ella.