La reina Letizia (45 años) ha tomado nota de lo que le ocurrió en su viaje de cooperación de hace dos años y no ha querido repetir los mismos errores. Entonces, sus estilismos fueron muy comentados por el glamour que desprendían en un país donde la pobreza está a la orden del día. Por eso, en esta ocasión la austeridad domina su maleta, tanto que ha querido 'reciclar' uno de sus atuendos más recientes.

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La esposa de Felipe VI (49) aterrizó la noche del lunes en Dakar y al salir del avión privado real dejó a la vista su elección de estilo: un vestido firmado por Hugo Boss en líneas blancas y negras que dan efecto de plisado. Ese estilismo fue el que vistió para recorrer los colegios el 19 de septiembre con la inauguración del curso escolar.

La reina, repitiendo vestido en Dakar. Gtres

A su llegada, le esperaba bajo los escalones del avión la primera dama de Senegal, Marième Faye. La mujer del presidente Macky Sall se presentó muy elegante en color burdeos y negro con turbante a juego. De hecho, tan 'sencilla' fue la elección de vestuario de Letizia, que la majestuosidad de la esposa del líder del país africano destacaba sobre ella. Algo que buscó expresamente la reina española, después de que en 2015 sus estilismos empañaran la verdadera causa de su viaje de cooperación.

Sin ostentosas joyas ni complementos, Letizia optó por unos zapatos de salón en charol firmados por Magrit, que también forman parte de su armario desde hace años y un pequeño bolso de mano de Uterqüe con estampado de piel de serpiente. El toque de lujo lo dio con sus pendientes de Chanel, aunque en términos generales el atuendo era muy sobrio y perfecto para casi pasar inadvertida en la noche senegalesa que la recibió.

Letizia quiere centrarse en el auténtico motivo que la ha llevado a África y mostrar su ayuda filantrópica al país y a los cooperantes españoles destinados allí. Por eso se acercó a la primera dama con una sonrisa, que fue inmediatamante contestada de igual manera, y mostraron su buena complicidad ante las cámaras que atestiguaron la llegada de la monarca. Pese a las buenas intenciones de Letizia, la atención sobre sus prendas será inevitable por parte de los medios, pero siempre sin desatender la importante labor que desempeñará en Senegal.

La esposa del presidente de Senegal y Letizia, hablando amigablemente. Gtres

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