Risto Mejide, 51 años

Risto Mejide, 51 años

Corazón

Risto Mejide (51), sobre su juventud en los 80: "Era el más pringado de la clase y me empujaban contra una farola"

El presentador de televisión explica cómo fue su etapa en el colegio.

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Risto Mejide es, sin duda, uno de los personajes más controvertidos y mediáticos de la televisión española.

Su personalidad directa y sin filtros ha cautivado y escandalizado al público por igual. Sin embargo, la imagen de Risto (51 años) que conocemos hoy no es más que la culminación de una serie de vivencias que marcaron profundamente su juventud.

Pocos conocen que su vida estuvo marcada por una infancia difícil, con episodios de acoso escolar. Así, lo reveló él mismo durante una entrevista en Planeta Calleja junto a Jesús Calleja.

En ese viaje introspectivo, Risto confesó que, cuando era niño, no había palabras como "bullying" o "acoso": simplemente él era diferente.

"Era un niño viejo. Hacía cosas de mayor. Pasaba de la pelota y jugaba al ajedrez", relató con crudeza. Aquella diferencia lo convirtió en "el más pringado de la clase", alguien objeto de burlas constantes por elegir caminos distintos a los de sus compañeros.

No hubo golpes físicos, pero sí humillaciones y juegos crueles. Risto recuerda una "broma" particularmente dura: un rito que que sus agresores llamaban "la vaca", consistente en abrirle las piernas entre varios compañeros y empujarlo contra una farola. "Eso me endureció en todos los sentidos", admitió.

Esa experiencia dolorosa lo marcó, pero también le enseñó a defenderse. Tal como contó, un día su madre le dio un rotulador y le pidió que escribiera algo en su papel que él colocaría en una estación de tren donde alguien había puesto su nombre.

Las vivencias de Mejide

A la mañana siguiente, se levantó, se fue al andén y escribió: "Pues te aguantas". Para Risto, ese fue su primer acto consciente de afirmación personal, su declaración de que ya no se rendiría ante esa humillación.

Años después, su infancia le serviría de combustible creativo. Fue esa experiencia de ser rechazado, juzgado y marginado lo que forjó su personalidad de defensor de la verdad incómoda, su estilo directo y su valentía para decir lo que otros callan.

Hoy en la televisión, muchos lo ven como "el jurado crítico, ácido, sin filtros", pero su dureza actual quizá tiene raíces en aquel niño que se vio obligado a sobrevivir desde pequeño sin respaldo.

Al abrirse y hablar públicamente de su pasado, Risto ha roto el estigma del silencio que suele acompañar al acoso escolar, recordando que detrás de la fama también hay heridas.

Su testimonio duro y honesto pone en evidencia lo que muchos callan y quizás eso lo humaniza más de lo que sus portadas acostumbran mostrar.

Actualmente es el rostro de Todo es mentira, el magacín de actualidad de Mediaset España en Cuatro, que acaba de renovar temporada y arrancó su octava edición el pasado septiembre con nuevas secciones y colaboradores.

En paralelo, Risto ha anunciado su retirada como jurado de concursos: la próxima edición de Got Talent España será la última en la que participará tras más de 20 años evaluando talentos en televisión.

Este año, el presentador ha hablado públicamente de su vida sentimental y su pasado matrimonial con sinceridad, algo poco habitual en él, lo que refleja un giro hacia una imagen más auténtica, menos construida.