Ridley Scott, director de cine, 87 años

Ridley Scott, director de cine, 87 años

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Ridley Scott, director de cine, 87 años: "Las películas actuales son una basura, tuve que empezar a ver las mías y es algo horrible"

El veterano director de cine británico habla sin reparo sobre la industria del cine.

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Ridley Scott, uno de los directores más influyentes del cine contemporáneo, vuelve a estar en boca de todos.

A sus 87 años, el realizador de Gladiator, Alien y Blade Runner no solo sigue trabajando sin descanso, sino que además mantiene intacto su espíritu crítico y su carácter frontal.

Durante un evento retrospectivo en el BFI Southbank de Londres, Scott sorprendió al público con unas declaraciones que han encendido el debate entre cinéfilos y colegas de la industria.

En medio de una conversación sobre su carrera y la evolución del cine, el director no se contuvo y lanzó una de sus frases más duras hasta la fecha: "La cantidad de películas que se hacen hoy, literalmente en todo el mundo, millones... y la mayoría son una mierda".

El comentario, recogido por Far Out Magazine, desató aplausos, risas y también cierta incomodidad en la sala.

Scott fue más allá y explicó que el problema no es solo la cantidad de películas que se producen, sino la falta de calidad y originalidad que percibe en muchas de ellas. "Nos estamos ahogando en la mediocridad", sentenció, dejando claro que no teme ir contra corriente.

Estas declaraciones no son una excepción en su discurso. Ya en 2017, el cineasta había asegurado en una entrevista que "el cine, en general, es bastante malo", y que la aclamación crítica muchas veces "no significa nada".

Sin embargo, esta vez su tono sonó aún más desencantado, especialmente cuando admitió que para disfrutar del séptimo arte ha tenido que volver a sus propios clásicos.

"Así que lo que yo hago, es algo horrible. He empezado a ver mis propias películas, y en realidad son muy buenas. No envejecen. La otra noche vi Black Hawk Down y pensé: '¿Cómo carajo hice eso?'", confesó.

Las palabras de Scott reavivan una discusión recurrente: ¿el cine moderno ha perdido su esencia? Para algunos, su crítica refleja la frustración de una generación que creció en una época de oro, donde los directores eran artistas con poder creativo.

Para otros, sus comentarios suenan a nostalgia y desconexión con las nuevas formas de contar historias, impulsadas por plataformas, efectos digitales y públicos más jóvenes.

Scott, siempre crítico

Aun así, su punto toca una fibra sensible en la industria. Hoy se producen más películas y series que nunca, pero también es cierto que muchas pasan desapercibidas, diluidas en un océano de contenido.

Scott, con su mezcla de arrogancia y lucidez, pone el dedo en la llaga: "Cuando todo se vuelve fácil de hacer, también se vuelve fácil de olvidar".

Ridley Scott puede sonar provocador, pero sus palabras invitan a reflexionar. ¿Estamos realmente ante una crisis de calidad en el cine moderno, o simplemente frente a un cambio de paradigma que a algunos les cuesta aceptar?

Lo cierto es que, fiel a su estilo, el director británico sigue filmando, criticando y, sobre todo, desafiando a la industria que él mismo ayudó a construir.