Los superalimentos tienen cada vez más protagonismo en nuestra dieta, nada extraño dado que se trata de alimentos que destacan por estar repletos de nutrientes y propiedades altamente beneficiosas para la salud. Por tanto, toda aquella persona que esté tratando de mantener un estilo de vida saludable, debe tenerlos muy presentes en su dieta. Aunque existen muchos alimentos dentro de esta categoría, en este caso nos vamos a centrar en una legumbre con más proteínas que el garbanzo, que ayuda a regular el colesterol y que no tiene grasas.

Es muy posible que nunca hayas escuchado hablar de ella, ya que en España no goza de la misma popularidad que en Asia, pero sería conveniente que comenzases a incluir en tu dieta al azuki, una legumbre muy recomendada por los expertos, que aconsejan su consumo de dos a cuatro veces por semana. Esta es una vaina roja típica de los países orientales, que es muy apreciada por la riqueza de sus nutrientes, además de tener un sabor particular que la hace ideal tanto para recetas dulces como saladas.

Como sucede con las alubias, el azuki debe ser puesto en remojo antes de su preparación, por lo que se recomienda hacerlo por la noche o al menos durante doce horas. Para disfrutar de sus beneficios puedes tomarlas en una ensalada, estofadas en un guiso u optando por preparar un hummus, un puré o una crema junto a unas verduras. Además, también se puede disfrutar con el azuki de un postre saludable, ya que es con lo que se rellenan los conocidos dorayaki típicos de Japón.

Los beneficios del azuki para la salud

El azuki, también conocido como judía roja, es un ingrediente perfecto para incluir en las dietas de pérdida de peso por tener un alto poder saciante, derivado de su gran cantidad de proteínas, las cuales alcanzan el 21% del total de su composición, superando así al 19% presente en los garbanzos. De esta manera, se convierte en una excelente fuente de proteína vegana. A ello hay que sumar que estas legumbres apenas tienen grasas (1,6 gramos por cada 100) y cuenta con suficiente cantidad de fibra para combatir el estreñimiento.

Por otro lado, es un superalimento muy recomendable para personas diabéticas, ya que cuenta con hidratos de carbono de asimilación lenta, lo que favorece que se mantengan estables los niveles de glucosa en sangre y se eviten los picos de azúcar. Por si esto fuera poco, tienen un alto contenido en hierro, y fortalece los huesos gracias al magnesio y calcio presente en su composición. Además, también aporta ácido fólico y vitaminas, especialmente del grupo B.

Este superalimento también nos ayuda a cuidar la salud cardiovascular, ya que son legumbres con un nivel muy bajo de grasas insaturadas y un alto contenido en fibra, lo que ayuda a regular el colesterol, reduciendo el malo (LDL) y subiendo el bueno (HDL).

A todo lo anterior hay que sumar que la azuki es la única legumbre que posee un efecto alcalinizante. De esta manera, en aquellos casos en los que la sangre es demasiado ácida, como cuando se consume demasiado azúcar o carne, será de gran utilidad para evitar problemas como la osteoporosis. Asimismo, tiene otros beneficios igualmente beneficiosos, como su efecto de tonificación sobre el corazón, el riñón y las vías urinarias, siendo un buen diurético y desintoxicante, además de antiinflamatorio y útil para combatir el lumbago, las diarreas, los edemas y la ictericia, entre otros.

Consejos para la cocción de los azukis

A la hora de preparar los azukis existen una serie de consejos que ayudarán a conseguir el mejor resultado en su cocción. Para empezar, es imprescindible el remojo: requieren de aproximadamente unas 12 horas en agua para que se puedan cocer con mayor facilidad. De esta manera se podrá contar con féculas y proteínas listas para ser incorporadas al organismo.

El agua deberá ser lo más pura posible, sin agregar sal, puesto que esta ralentizaría el reblandecimiento al mismo tiempo que provoca una alteración del sabor. Además, debes tener en cuenta que su tamaño aumenta, por lo que debes colocarlas en un recipiente que sea lo suficientemente amplio y cubrir con el tripe de agua, y antes de cocinarlos, se deben escurrir y pasar por agua fría para eliminar así los azúcares que desprenden mientras se encuentran en remojo.

[La legumbre que tiene el doble de fibra que las lentejas y tomamos poco en España]

Por otro lado, se recomienda agregar alga kombu al agua de cocción. Una vez que los azukis están limpios, remojados y escurridos, se colocarán en el fuego con el agua o el caldo frío y sin sal, para que así la piel no se endurezca. De forma simultánea puedes agregar el resto de ingredientes, así como un poco de esta alga, que contribuirá a que sean más digestivas. Para añadir la sal, espera al último momento.

Para finalizar, es necesario saber que siempre se debe cocinar a fuego lento. Si optas por una olla tradicional, durante los primeros 10 minutos deben hervir a fuego rápido sin estar tapados, para luego continuar con la cocción a fuego lento y continuo, de manera que no se rompa la piel.