Hacer ejercicio es, sin duda alguna, una de las mejores decisiones que podemos tomar para nuestra salud. Aparte de mejorar el estado de ánimo, fortalecer el corazón, ayudar a controlar el peso, también reduce el riesgo de enfermedades crónicas.
Sin embargo, como en todo, el exceso también tiene sus consecuencias. Cada vez es más habitual ver a personas que, motivadas por tener un cuerpo atlético, entrenan largas horas al día sin descanso, especialmente con rutinas de cardio intenso.
Y no siempre son conscientes de que esa sobre exigencia puede pasar factura a su cuerpo, esta es una de las razones por las que se ha pronunciado Isabel Vina, una médica española que ha confesado que la pérdida de hierro provocada por entrenamientos excesivos, puede afectar de forma directa a nuestra salud.
Desde síntomas como fatiga persistente hasta señales más visibles como la caída del cabello o el debilitamiento de las uñas, son algunas de estas consecuencias. Su advertencia es bastante clara: entrenar en exceso sin cuidar el equilibrio nutricional puede ser perjudicial.
"Las personas que realizan una gran cantidad de ejercicio físico cardiovascular incrementan las pérdidas gastrointestinales de hierro", explica la experta.
Esto ocurre por el daño repetido que sufre el tracto digestivo durante el esfuerzo físico sostenido. "Hay una mayor cantidad de microtraumas en las células intestinales", afirma.
A esto se le suma que "se incrementa mucho la pérdida de hierro por el sudor", lo cual afecta especialmente a quienes practican deporte con mucha frecuencia y durante largos periodos.
Las consecuencias de esta carencia no son menores: hay menos oxigenación muscular, una sensación constante de fatiga, uñas frágiles, piel apagada y caída del cabello.
El cuerpo, simplemente, no puede mantener el ritmo si no tiene los nutrientes necesarios. Por eso, la médica recomienda prestar atención a la dieta y, si es necesario, reforzar con un buen suplemento de hierro.
Entre las opciones recomendadas destaca el hierro bisglicinado, que "mejora su absorción" y debe tomarse "junto con otros micronutrientes como la vitamina C, la vitamina B2 y la B6·.
Esto no solo favorece una mejor asimilación, sino que permite que el hierro se integre de forma eficaz en las hemo proteínas que son las encargadas del transporte de oxígeno en sangre.