La Federación EUROPARC ha otorgado la certificación de la Carta Europea de Turismo Sostenible (CETS) al parque natural Sabinares de Arlanza-La Yecla de Burgos para el periodo 2023-2027. Un reconocimiento que eleva a seis el número de espacios certificados con la Carta Europea de Turismo Sostenible.

Lo ha hecho en una ceremonia especial de entrega de premios que tuvo lugar el pasado 30 de noviembre en el Parlamento Europeo y en la que la Federación también renovó su acreditación con la CETS a 11 espacios naturales y dio la bienvenida a la red a otros dos ubicados en Cataluña, el del Cadí-Moixeró y el del Alto Pirineo. 

Del mismo modo, renovó su adhesión a la CETS a 11 destinos sostenibles: el parque natural Paneveggio Pale di San Martino, la reserva natural Monte Rufeno, el área marina protegida Penisola del Sinis – Isola di Mal di Ventre, el parque natural Adamello Brenta y el área marina protegida de Porto Cesare en Italia; el transfronterizo parque natural marítimo de los Alpes y el parque nacional Mercantour situado entre Italia y Francia; el parque nacional Kemeri de Letonia; los parques Garraf, d’Olèrdola i del Foix, el parque nacional de Garajonay y los monumentos naturales del Maestrazgo en España; y el parque Nacional Cairngorms en Reino Unido.

Cabe destacar que el conjunto de espacios naturales protegidos europeos acreditados con la CETS es hoy la red más grande de profesionales del turismo sostenible en áreas protegidas, que incluye con las nuevas incorporaciones un total de 94 espacios naturales protegidos en 15 países diferentes.

Y es que, según ha dado a conocer la Junta, estos destinos sostenibles están repartidos por toda Europa, pero se unen en torno a la visión compartida de hacer del turismo sostenible una experiencia significativa de calidad, salvaguardando los valores naturales y culturales, apoyando el modo y la calidad de vida local, y fomentando el desarrollo sostenible del territorio.

La Carta Europea de Turismo Sostenible en Espacios Naturales Protegidos (CETS) es una herramienta de trabajo, pero también un reconocimiento que otorga la Federación EUROPARC a los espacios protegidos que demuestran impulsar un turismo sostenible en colaboración con los agentes del territorio, a través de una planificación efectiva, estructuras de gestión y procesos participativos, abordando los aspectos clave de la sostenibilidad turística en estos territorios especialmente valiosos y frágiles.