Los bomberos de Burgos realizaron 2.432 intervenciones a lo largo de 2019, la mayor cifra de los últimos 33 años y 61 más que en el ejercicio anterior, según ha señalado este miércoles la concejal de Seguridad Ciudadana, Blanca Carpintero, durante la presentación de la memoria anual del servicio.

De las 2.432 intervenciones, 186 se realizaron fuera del término municipal en base al convenio existente entre el Ayuntamiento burgalés y la Diputación Provincial para la prestación de servicios de emergencia.

En el desglose de las intervenciones, destacan las salidas por incendios, un total de 546, de los que 177 fueron en contenedores, 161 de vegetación, 106 en edificios, 32 en vehículos y el resto en industrias, transformadores, vertederos y fincas agrícolas principalmente.

Por otra parte, los bomberos realizaron 383 salidas por salvamentos, de los que 273 fueron rescates de personas, 57 de animales, 49 estuvieron vinculados al tráfico y cuatro a hundimientos y explosiones.

También acometieron 1.107 asistencias técnicas, principalmente vinculadas a saneamientos de fachadas, limpieza de ramas y calzadas y relativas a enjambres y similares, y se atendieron 384 salidas preventivas, además de atenderse doce llamadas que resultaron ser falsas alarmas, frente a las cinco que se contabilizaron en 2018.

Estas cifras supusieron un aumento del tres por ciento en el número total de intervenciones de los bomberos, teniendo en cuenta que se incrementaron un 24 y 15 por ciento las relativas a asistencias técnicas e incendios, respectivamente, y por contra disminuyeron las vinculadas a salvamentos y labores de prevención en un 1,5 y un 37 por ciento, respectivamente.

Los bomberos, que prevén la incorporación de trece personas mediante una nueva convocatoria pública de empleo, cerraron el año con quince vehículos en servicio y 94 personas en plantilla, de las 125 que prevé su relación de puestos de trabajo, tras registrarse cinco jubilaciones en diferentes escalones de su organigrama.